IBARRECHE Y TENA
Después del subcampeonato de Torneo 1993-94, Santos Laguna vino a la baja y eso provoco la salida de Pedro García; en la transición participó Martín Ibarreche como técnico interino y después Miguel Angel “Zurdo” López cuya carte de presentación era el título obtenido con el América.
A la siguiente temporada, 1994-95 Pedro García se mantuvo en la dirección técnica, sin embargo, el bajo desempeño del equipo hizo que se tomara la decisión de dar el mando de manera interina, a Martín Ibarreche Vázquez, que luego de su breve estancia dio paso a Miguel Ángel “Zurdo” López, técnico argentino cuya carta de presentación era haber hecho campeón al América; en esa ocasión se logró el octavo sitio general y de esta forma el boleto a la liguilla, en donde enfrentaron a las “Chivas Rayadas” del Guadalajara, quienes salieron avante en el compromiso, de la mano de Alberto Guerra.
De cara a la Temporada 1995-96, Santos Laguna voltea nuevamente hacia un técnico extranjero, en esta ocasión uno debutante en el futbol mexicano, aunque de exitosa trayectoria como jugador en Cruz Azul, Patricio José Hernández Sánchez, que entregó pobres resultados y debido a su bajo desempeño en la primera etapa se contrató a Alfredo Tena Garduño; el “Capitán Furia” no tuvo el tiempo suficiente para calificar y al final se ocupó el lugar número 14 de la tabla general.
Se inician los torneos cortos
Los directivos del futbol mexicano decidieron modificar la estructura de la competencia, por lo que dividieron el torneo en dos cortos y con ello habría dos finales en el año. Fue así que en el denominado Torneo de Invierno 1996, primero de la nueva modalidad, Alfredo Tena convirtió a Santos Laguna en campeón del máximo circuito del futbol mexicano; terminó en la segunda posición de la tabla general, sólo abajo de los “Potros de Hierro” del Atlante, dirigidos entonces por Miguel Mejía Barón; a partir de este torneo, el conjunto santista se convirtió en uno de los equipos más competitivos del futbol mexicano.