SALTILLO, Coah.- El 4 de abril para los universitarios de la UAdeC, sí se olvida. No es como el mítico, casi culto de cargo, 2 de octubre de 1968, siempre presente en la mente de los “pumas” de la UNAM, que año con año lo conmemoran los unamitas.
En Coahuila, pocos, muy pocos en su máxima casa de estudios, saben que el 4 de abril pasado se llegó al 30 aniversario de haber logrado la autonomía, luego de que un puñado de estudiantes y maestros luchó por la libre autodeterminación de su institución, que desde su fundación en 1957 era mandada por una Junta de Gobierno, presidida por el gobernador en turno.
VIENTOS DE FRONDA
En México, en la segunda mitad de los años de 1960 y en la primera mitad de los de 1970, la mayoría de las universidades estatales obtuvieron su autonomía. Fueron años de protestas y de violencia en estas casas de estudio, que fueron alcanzadas por los vientos de fronda que soplaron en las universidades de los Estados Unidos y de Europa; como el “Mayo Parisino” que estuvo a punto de derrocar al gobierno de Charles de Gaulle, en Francia, y el 1966 de la Universidad de Berkeley, California, en los Estados Unidos.
En nuestro país, fueron especialmente violentos los movimientos estudiantiles “El 68” de la UNAM, y los de las universidades de Puebla, Guadalajara y de Nuevo León, entre otros.
Aquí en Coahuila, en nuestra entonces Universidad de Coahuila desde el inicio del ciclo escolar 1972-1973 cobraba fuerza entre los círculos estudiantiles, la intención manifiesta del gobernador del estado, Eulalio Gutiérrez Treviño, de que se iniciaran los estudios correspondientes para decretar la autonomía universitaria, debido al crecimiento que registraba la Universidad.
Pero también el ala radical de la Federación de Estudiantes de Saltillo en la Universidad de Coahuila (Fesuc), encabezada por el estudiante de Ciencias Químicas, Pablo Reyes Dávila, en sus reuniones tocaba el tema de obtener la autonomía para la Casa de Estudios.
En marzo de 1973, un movimiento en el ajedrez político dio la oportunidad a los estudiantes universitarios de promover la ansiada autonomía.
El sábado 24 de dicho mes, al filo del mediodía en sus oficinas del Palacio de Gobierno, el gobernador Gutiérrez Treviño, en su calidad de presidente Ex Oficio de la Junta de Gobierno que regía a los universitarios, designó como rector al licenciado Jorge Mario Cárdenas Gonzáles, director de la Facultad de Derecho de la Unidad Torreón, quien debía protestar como rector el día 27 en una ceremonia especial.
Previamente, la Junta de Gobierno había aceptado la renuncia al cargo de rector, del doctor Arnoldo Villarreal Zertuche, quien solicitó separarse del cargo de manera definitiva el 15 de marzo, para buscar una diputación por el PRI.
Esto molesto a los universitarios, sobre todo a los de la Fesuc, quienes veían como otra imposición del gobernador en turno, la designación de uno de sus allegados en la rectoría de la entonces UC.
TOMAN LA RECTORIA
El mismo día 24, al filo de la media noche, los integrantes de la Fesuc tomaron la rectoría y externaron su propósito de no permitir que el licenciado Cárdenas Gonzáles ocupara el cargo.
Al siguiente día, llegaron cientos de estudiantes a apoyar a los de la Fesuc y se instalaron en la rectoría, tanto en la explanada como en su interior, acompañados por la tradicional música de protesta de aquellos años, difundida a través de los viejos parlantes de cono. En los jardines de la rectoría y en los del aledaño Ateneo, acamparon docenas de jóvenes con vestimentas todavía al estilo “hippie”, eran principios de la década de 1970, todavía la consigna juvenil era el “amor y paz”.
Los líderes del movimiento decidieron el mismo domingo, la formación de un Comité de Lucha con dos representantes de cada escuela para determinar las acciones que se llevarían acabo, para repudiar la designación de rector que había hecho el gobernador.
SE DIVIDEN LOS UNIVERSITARIOS
No toda la comunidad universitaria apoyó la toma de la rectoría y la exigencia de que el gobierno estatal reconociera la necesidad de la libre autodeterminación de la Universidad. De hecho, a partir de estos momentos se habló abiertamente de la autonomía para la Casa de Estudios.
Las escuelas de Torreón de Derecho y Ciencias Sociales, Odontología, Medicina, Comercio y Administración, y la preparatoria Venustiano Carranza y la preparatoria de San Pedro; publicaron un desplegado periodístico apoyando la designación del licenciado Cárdenas Gonzáles.
El lunes 26, la rectoría siguió tomada y en Saltillo la mayoría de las escuelas, a excepción de la Facultad de Jurisprudencia, suspendieron las clases. Por la tarde, estudiantes de Derecho de Torreón, llegaron a Saltillo en autobuses del transporte urbano, para recorrer la ciudad en una manifestación para apoyar la actitud del gobernador.
Aunque la situación se hizo tensa, pues algunos de los torreonenses pasaron frente a la rectoría insultando a los que la mantenían tomada, no estalló la violencia entre los dos grupos.
El martes 27, el gobernador decidió suspender la ceremonia en la que tomaría su cargo el nuevo rector. “Hemos estado estudiando el conflicto durante varias horas, y la Junta de Gobierno Esta preocupada y con el deseo de llevar adelante las cosas en un clima de comprensión y evitar divisiones y enfrentamientos, entre la propia comunidad universitaria”, expresó en una conferencia de prensa en su despacho.
Durante los siguientes días, los miembros de la Fesuc y otros estudiantes universitarios, bloquearon las carreteras que convergen en Saltillo; volantearon y marcharon por las calles hasta la Plaza de Armas, frente al Palacio de Gobierno, para rechazar la imposición del gobernador y , lo más importante, pedir de manera abierta la autonomía.
SE ABRE EL DIALOGO
El viernes 30, los integrantes del Comité de Lucha del movimiento estudiantil sostuvieron un diálogo en el Palacio de Gobierno con el gobernador Gutiérrez Treviño, para buscar una solución al conflicto. El jefe del Ejecutivo se mostró dispuesto a acceder a las exigencias de los universitarios, y hasta les informó que había convocado a un periodo extraordinario de sesiones al Congreso del Estado, para reformar la Ley Orgánica de la Universidad de Coahuila.
Les comunicó a los universitarios que su propuesta era que la autoridad máxima en la Casa de Estudios fuera un Consejo Universitario, paritario, formado por alumnos y maestros; y que debería reformarse el artículo 128 de la Constitución de Coahuila
El lunes 2 de abril, los estudiantes tomaron dos estaciones de radio momentáneamente, para difundir entre la comunidad saltillense sus demandas y exigencias. En tanto, seguía la suspensión de clases.
El martes 3, el gobernador convocó de urgencia a una reunión nocturna en su despacho con funcionarios de su gabinete y los líderes de la Fesuc. Ahí, por fin cedió el gobernador y les comunicó a los entusiastas jóvenes que al día siguiente se promulgaría el decreto que le daría la autonomía a la UC.
El miércoles 4 de abril sesionó el Congreso y por unanimidad aprobó la iniciativa del gobernador que le dio la autonomía a la Univerdidad.
A las 12:15 horas de este mismo día, se reunieron cientos de estudiantes universitarios en la Plaza de Armas, para dar lectura a la iniciativa del gobernador, para festejar su triunfo y para gritar su tan anhelado sueño:
¡ UAC ¡ ¡ UAC ¡ ¡UAC¡.....
Finalmente, a las 17:00 los estudiantes entregaron intacta la rectoría. No cometieron actos vandálicos ni saqueos.
La rectoría la recibió el secretario de la Universidad, Melchor de los Santos Ordóñez, quien de manera interina, a los 23 años de edad, se hizo cargo del despacho de rector, y en 1975 se convirtió en el primer rector electo por los estudiantes y maestros, mediante el voto libre, directo, secreto y universal; una de las conquistas obtenidas por quienes lucharon por la autonomía.
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N. de la R.- El autor de esta crónica, reportero de EL SIGLO, participó como estudiante del Ateneo Fuente de Saltillo, en dicho movimiento. En 1988, junto con el historiador Alvaro Canales, escribió un libro sobre la historia de la UAdeC, en el que se incluyó un capítulo de la lucha por la autonomía, que hoy en parte se reproduce en este periódico.