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JERUSALÉN.- El viceprimer mimistro israelí, Ehud Olmert, dijo ayer que matar al líder palestino Yasser Arafat es una opción dentro de la amenaza de “removerlo” por ser un obstáculo para la paz.
“Matarlo es definitivamente una de las opciones”, declaró Olmert, miembro del gabinete del primer ministro Ariel Sharon, a la Radio de Israel.
El jefe de los negociadores de paz palestinos, Saeb Erekat, dijo en respuesta: “Ese es el pensamiento y el actuar de la mafia, no de un gobierno”.
Erekat dijo que Israel está “determinado a matar a Arafat y lanzar a los palestinos al caos y la anarquía”.
El legislador palestino apuntó además que exiliar a Arafat sería tanto como asesinarlo pues el líder no accederá, bajo ninguna circunstancia, a ser deportado de manera voluntaria y que tal acción será el fin de la Autoridad Palestina.
“La deportación conducirá al asesinato de Arafat, y si Arafat es asesinado entonces la Autoridad Palestina también lo estará”, dijo Erekat al explicar que la muerte del presidente conducirá a una total anarquía en la que la milicia terminará con la vida de todos.
El diario israelí Maariv reportó ayer que Avi Dichter, jefe del servicio de seguridad interna Shin Bet, dijo en debates del gabinete que sería mejor matar a Arafat que expulsarlo.
Según el informe, Dichter considera que la muerte de Arafat tendrá un efecto a corto plazo, con protestas en los territorios palestinos que durarían solamente unas semanas, mientras que exiliado pudiera regresar al escenario mundial y acumular simpatías.
La decisión también ha afectado los esfuerzos palestinos de poner fin a una crisis política. El primer ministro designado Ahmed Korei aplazó sus planes de formar un gabinete para reemplazar al de Mahmoud Abbas, un moderado que renunció acusando a Arafat e Israel de no darle el respaldo suficiente.
Olmert dijo que otra opción israelí podría ser utilizar tropas y equipos electrónicos para aislar totalmente a Arafat, de 74 años, en sus oficinas.
“Sería como un prisionero en una mazmorra (...) recibiría sus raciones de comida dos veces al día pero no podría reunirse con nadie, ofrecer conferencias de prensa, dar entrevistas, hablar por teléfonos regulares o celulares”, dijo Olmert.
El gabinete de seguridad de Israel decidió “remover” a Arafat después de dos atentados suicidas el martes que mataron a 15 israelíes, el incidente de hecho más reciente en un levantamiento palestino de tres años contra la ocupación, pero no dijo cuándo lo llevaría a cabo.
El lenguaje dejó el campo abierto para varias opciones, entre ellas exiliar, aislar o matar a Arafat, una propuesta que según los periódicos israelíes fue planteada por el ministro de Defensa Shaul Mofaz, pero Sharon rechazó.