“Que Julio Díaz ya nos deje trabajar en paz. Es lo que le pedimos. Y, claro, que deje de estar simulando, porque no es verdad que ya hizo la entrega física del inmueble, propiedad del gremio”, manifestó categórico el actual presidente del Colegio Médico de Durango, Francisco Fournier Drew.
Lo anterior lo expresó al ser entrevistado en el perímetro del terreno que es propiedad de los médicos colegiados, el cual está ubicado a un costado del Colegio de Contadores Públicos, a espaldas del Colegio del Bosque y casi a un lado de la Casa Hogar Mano Amiga.
Fournier expuso: “El Patronato de la Casa Club del Colegio Médico tiene la expectativa de que, por fin, después de casi cuatro años de estar en completo abandono, se podrá empezar a hacer realidad el proyecto en el terreno que desde hace años es propiedad del Colegio.
“Platicamos con la nueva directiva del organismo, y les dijimos a los del Patronato que en cuanto Julio Díaz Castañeda –líder anterior- nos hiciera entrega física del inmueble daríamos inicio a los trabajos correspondientes a la construcción. Sin embargo, Julio insiste que ya nos entregó el terreno. ¿De qué se trata? El Patronato observa las declaraciones de éste y nos vuelve a decir: no que no se los habían entregado. Ya nos cansamos de la actitud del Presidente anterior del Colegio”.
Manifestó el entrevistado que si Julio Díaz pretende algún puesto público en algún área gubernamental, está en todo su derecho, pero le reprochó que siga haciendo declaraciones a nombre del gremio médico, y peor aún, que siga con su actitud protagonista y de división, porque eso ha perjudicado tanto al organismo.
El líder actual de los profesionales de la medicina en el estado de Durango consideró preocupante que no puedan progresar los médicos como Colegio por posturas incomprensibles como la del personaje en mención, ya que el espacio de tierra que tienen como única propiedad, en el que está construido un pequeño establecimiento que pudiera fungir como oficinas, se encuentra en pésimas condiciones.
“No nos ha entregado ni las llaves ni el terreno. No nos ha dado los estatutos. Desconocemos si tiene alguna acta de las asambleas que realizó. Nos niega el acceso al archivo del Colegio. Tampoco nos quiere dar la primera acta constitutiva del organismo. No podemos tramitar nada, ni hacer recibos, ni abrir una cuenta bancaria. Nos quiere tener bloqueados casi”, declaró inconforme Fournier Drew.
Díaz Castañeda –según el nuevo Presidente del Colegio Médico- está obsesionado por no dejar trabajar al Consejo Directivo actual. Y reclama que “si su problema es conmigo, que se acerque directamente a dialogar, pero que no bloquee nuestros proyectos en perjuicio de todos los socios”.
Proyecto
Abandono
El terreno que Julio Díaz dice haber entregado ya a la nueva directiva del Colegio Médico, fue donado al organismo de profesionistas hace aproximadamente 16 años por las autoridades estatales.
Sin embargo, no se ha hecho nada significativo en él, sino únicamente presenta una construcción modesta que, por el desuso y el abandono, está deteriorada.
El espacio físico es de aproximadamente 2 mil metros cuadrados en total. Su extensión y condiciones permite la puesta en marcha de un proyecto que para la actual dirigencia del Colegio elaboró la carrera de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Durango.
En los planos y proyectos plasmados en papel, se prevé la creación de un salón de usos múltiples, con capacidad para 350 personas; también un Auditorio Audiovisual y un área de oficinas. El costo aproximado es de 3 millones de pesos, pero se advierte que difícilmente podrá cristalizarse este proyecto de la Casa Club si no se empieza con los trabajos.