Luego de anunciar que el Programa de Alianza para el Campo tendrá un presupuesto federal de 108 millones 942 mil 694 pesos para el estado de Durango, el delegado de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Antenor Torróntegui Manjarrez, advirtió ayer que se evitará a toda costa la orientación política de los planes y subsidios de apoyo para el sector agropecuario.
Durante una rueda de prensa convocada para presentar la experiencia de los productores del sector agropecuario de Durango en las mesas de diálogo para la formulación de un Acuerdo Nacional para el Campo, aseguró que no permitirá regresar a “prácticas del pasado” que implicaban orientar políticamente los apoyos destinados para el medio rural.
Destacó que la delegación Sagarpa e incluso el Consejo Estatal para el Desarrollo Rural Sustentable, estarán al pendientes y vigilantes de que los programas de apoyo para el campo, sean Alianza, Procampo, Empleo Temporal, Reconversión Productiva u otros, cumplan con los objetivos de fortalecer al sector agropecuario, fuera de cualquier interés u orientación política.
Manifestó que la tendencia es a procurar una manejo ordenado, equitativo, eficiente y transparente de los recursos para el campo, con la finalidad de incentivar el desarrollo y la competitividad de los productores rurales en la entidad.
En cuanto al presupuesto del plan aliancista, sostuvo que los 108.9 millones de pesos convenidos para el estado de Durango en este 2003, representarán un crecimiento presupuestario del orden del 13.6 por ciento, en comparación con el ejercicio del 2002 que se estableció con un techo de 95 millones 904 mil pesos aportados por la Federación.
En el ejercicio del 2002 el plan aliancista alcanzó en conjunto un presupuesto de 135 millones 904 mil pesos, de los cuales 40 millones fueron aportados por el Gobierno del Estado. Sin embargo, para este 2003 se iniciará el proceso de concertación para definir la cuota estatal, apuntó Torróntegui Manjarrez.
Recalcó que en el caso de los programas de Reconversión Productiva y Empleo Temporal todavía no se definen los techos presupuestarios, pero hay confianza de que estén por arriba de lo destinado el año pasado.