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MÉXICO, DF.- El presidente Vicente Fox afirmó ayer que con una reforma fiscal México estará el año próximo ante la gran oportunidad de aprovechar diversos beneficios sociales y de todo tipo, aunque también, dijo, “tenemos la posibilidad de volver a dejar pasar las oportunidades y quedarnos sin hacer nada”. Advirtiendo que “estamos frente a tres meses cruciales para las reformas estructurales”.
Expuso que para su gobierno, con una reforma fiscal, el presupuesto de 2004 puede representar importante cantidad adicional de transferencias a estados y municipios, que duplicaría la inversión que se hace actualmente por todos los estados del país.
Esa cantidad, estimó en el marco de la sesión del Consejo para el Diálogo con los Sectores Productivos, impactaría al doble la construcción de infraestructura en el país y a través de la fórmula público-privada crecería en 20 por ciento respecto al presente año, y pasaría de 400 mil millones a 500 mil millones de pesos de inversión directa en infraestructura, energía y vivienda.
También se pasaría de 500 mil a 575 mil viviendas de este año al 2004, se sostendría y aumentaría la cifra comprometida en el Acuerdo Para el Campo y podría crecer el gasto social con 750 mil familias más que se pueden añadir al programa oportunidades.
Comentó que, de igual forma, se podría poner en marcha el programa “Hambre Cero” para asegurar que en este país no quede ninguna familia sin alimento suficiente en su mesa.
Agregó que además se podrían construir las universidades y las escuelas tecnológicas que se requieren para atender la creciente demanda de jóvenes, los que afortunadamente están siguiendo ya a un nivel superior de educación.
Con la reforma fiscal, añadió el presidente Fox, se podría avanzar de 500 mil familias que están hoy en el Seguro Popular a dos millones de familias inscritas e iniciar la construcción de las unidades de tercer nivel y hospitales de especialidades que urgen en el país, particularmente en los estados.
De manera adicional se puede hacer un equipamiento generalizado de todos los hospitales del país con material moderno y asegurar que en cada estado cuando menos haya un acelerador lineal para la población local.