BANDERAZO DE SALIDA.- Gratitud: sentimiento que se expresa cuando se ha recibido un favor y se espera recibir otro. * Sicólogos y expertos en conducta humana están de acuerdo en que todos los hombres y mujeres han mentido alguna vez en su vida; que los hombres mienten más que las mujeres y que todos, en general, aunque sean viejos, siguen mintiendo... En un estudio hecho al respecto se encontró que el 65% de los entrevistados aceptó que solían mentir con alguna frecuencia, y muchos dijeron que lo encontraban divertido... Las mentiras que todos decimos alguna vez van desde las llamadas "mentiritas blancas", como la de fingir que se tiene un dolor de cabeza para no asistir a una fiesta aburrida, hasta decirle a la muchacha a quien se quiere conquistar que uno está por heredar un millón de dólares de un tío imaginario que vive en Londres.
CURVA PELIGROSA.- Hombres y mujeres, más éstas que aquéllos, mienten respecto a su edad... Mienten cuando llegan tarde al trabajo, o cuando no quieren ir a trabajar... Los jóvenes mienten cuando no hicieron la tarea escolar, cuando se les pregunta si fuman y si toman licor... Las mujeres mienten respecto a su vida matrimonial, cuentan fantasías que no tienen en su vida sexual, y elogian falsamente a sus hijos... Hay quienes mienten respecto a la situación económica en que viven o a la condición social en que se desenvuelven... Hay quienes mienten sobre una falsa y gran amistad que no existe con su jefe, sobre las vacaciones que proyectan a un lugar caro, sobre sus conquistas amorosas... Y si los corren del trabajo, dicen que ellos renunciaron.
RECTA FINAL.- Los hombres mienten cuando llegan tarde a casa (me encontré a un viejo amigo y nos dio tanto gusto que fuimos a tomar una copa); mienten sobre su vida conyugal cuando hablan con una muchacha bonita (pues sí, estoy casado, pero no soy feliz); mienten respecto a su posición en el trabajo (soy el brazo derecho del jefe y me confía todos sus secretos)... Las mujeres les mienten a sus amigas respecto a su vida conyugal (Jorge es tan romántico como cuando nos casamos); dan un falso brillo a su triste vida de solteras (pues a mí me asediaron varios pretendientes y jamás me quedé sin bailar en una fiesta); falsean la conducta de sus hijos (pobre Juanita, qué hijos tan rebeldes tiene. Los míos, en cambio, son muy respetuosos y obedientes)... Y todos, hombres y mujeres mienten cuando dicen que mañana pagarán lo que deben, y agregan con una sonrisa que se les olvidó hacerlo; mienten cuando afirman que la comida a que los invitaron estuvo exquisita aunque no les haya gustado, y cuando aseguran que jamás se han atrasado en el pago de la renta.
META.- Los niños aprenden a mentir por culpa de sus padres. Hacen unos garabatos y la madre afirma que su hijo es un artista en ciernes y que será un futuro Picasso, les aplauden a rabiar cuando medio tartamudean un poema ante algunos invitados... Los niños aprenden a mentir cuando oyen a su mamá ordenarle a la sirvienta: "Contesta el teléfono, y si es la pesada de Gloria dile que salí de compras"; cuando el padre le dice a la esposa: "Ése que toca debe ser un cobrador. Dile que salí de viaje una semana"; o cuando papá, después de una noche de libaciones alcohólicas, le dice a la esposa: "Habla a la oficina y diles que tengo un ataque de colitis y que no puedo ir a trabajar"... Un hombre miente cuando le dice a una mujer que la ama intensamente, mientras de reojo mira a otra que pasa a su lado.