El Instituto de Defensoría Pública en Durango es único en su tipo a nivel nacional, aseguran
El encarcelamiento de personas que por su precaria situación económica se les ha llevado a purgar condenas por delitos no cometidos, que sólo por ser pobres fueron presas de abogados o jueces sin escrúpulos, hicieron necesaria la aparición de la figura del defensor de oficio y casi un siglo después la aparición de la Ley del Instituto de Defensoría Pública del Estado de Durango.
En Durango, aun cuando los sueldos de los defensores de oficio son raquíticos, (apenas seis mil 260 pesos mensuales), esos profesionales del derecho llegan a atender hasta 40 personas al día y según comentarios de algunos de ellos que fueron entrevistados, tratan de sacar todo el trabajo adelante porque no les queda otra; no hay trabajo en otra parte, se resignan.
Origen
El Instituto de Defensoría Pública surgió hace tres meses en la entidad, pero la figura del defensor de oficio existe desde 1917, ya que en el artículo 20 de la Constitución se indica que el inculpado tiene en todo proceso penal, entre otras, la garantía de una “defensa adecuada, por sí, por abogado, o por persona de su confianza; pero si no quiere o no puede nombrar defensor, después de haber sido requerido para hacerlo, el juez le designará un defensor de oficio”.
El 23 de mayo del 2001 se aprobó la Ley del Instituto de Defensoría Pública del Estado de Durango, pero fue hasta el mes de mayo del año 2003 en que se crea físicamente el organismo.
Radiografía interna
La directora de dicha dependencia, Mayela Almonte Solís, señaló que con los cambios a la Constitución del Estado se logró la aparición de este organismo, el cual asegura que es único en el país.
Indicó que la ciudadanía no conoce muy bien a la Defensoría, pero con el tiempo ha crecido la demanda de los servicios prestados en dicho lugar, al igual que el apoyo que brinda; ahora se cuenta con defensores en segunda instancia tanto civil como penal.
Actualmente funciona con una plantilla de 15 abogados defensores en la capital, los cuales reciben un pago total de seis mil 260 pesos mensuales por prestar sus servicios y atienden, entre todos, un promedio de 40 personas al día.
“El número de defensores es reducido pero se trabaja redoblando esfuerzos y se da una atención adecuada, se respetan términos y se satisfacen todos los procesos”, expresó la directora del Instituto.
Declaró que se ha recibido apoyo por parte de Gobierno del Estado, tanto así que se preparan para el mes de septiembre cursos de actualización para los defensores públicos, con la intención de que el servicio sea más eficiente y profesional.
Señaló que es importante destacar que su labor no sólo es en juicios, sino también en el trámite y seguimiento de averiguaciones, consultas y atención de asuntos en los que se requiere asesoría legal.
Aseguró que hasta el momento no se ha sancionado a algún abogado que pertenezca a dicho organismo por incurrir en irregularidades, pero a partir de este mes se realizarán revisiones en las diferentes defensorías públicas en los trece distritos que componen el Poder Judicial del Estado.
Avance importante: Tribunal Superior de Justicia
El titular del Tribunal Superior de Justicia del Estado, José Hugo Martínez Ortiz, señaló que la conformación del Instituto de Defensoría Pública es un avance significativo que no sólo beneficia a los más necesitados, sino que da seguridad jurídica a los procesos para que no sean invalidados por la falta de un defensor.
“Es un avance en la procuración e impartición de justicia, siento que está dando los resultados que se esperaban”, comentó Martínez Ortiz.
Recalcó la importancia de preparar al personal que labora en dicho lugar, puesto que se requiere de mucho profesionalismo, por lo cual debe de pensarse en la forma de dotarlos de los recursos que se requieren para sustentarlos.
Indicó que posiblemente con el tiempo surja algún tipo de convenio entre ambas dependencias para participar en la instrucción de los defensores, pero sería después de que se valore su trabajo.
Faltan recursos: Barra de Abogados.
El presidente de la Barra de Abogados, Juan Francisco Vázquez Novoa, destacó la importancia de la figura del defensor de oficio y su ampliación hasta los casos de materia familiar.
Calificó de acertada la creación del Instituto de Defensoría puesto que es importante el control de los abogados que realizan estas actividades y que la manera de efectuarlo no es costosa.
“Los defensores de oficio tienen una sobrecarga de trabajo por la falta de recursos; por ello es pertinente que la institución exprese al Ejecutivo sus requerimientos para brindar una justicia generalizada”, asentó Vázquez Novoa.
Consideró que los defensores de oficio merecen respeto, están capacitados, pero no tienen siempre la oportunidad de otorgarle a todos los casos el tiempo y los recursos que se requieren; por ello debe asignarse el presupuesto necesario para que exista el número adecuado de abogados.
El Presidente de la Barra de Abogados dijo que no han tenido quejas por parte de los defensores, ni por los usuarios en relación con su trabajo, pero que están en la mejor disposición de apoyar el mejoramiento de las labores del Instituto.
Destacan usuarios buen trato.
Señalaron algunos beneficiados por las acciones de los defensores de oficio que durante el tiempo que ha durado su proceso han sido atendidos correctamente y que el trato ha sido agradable.
“Nos han ayudado mucho, los casos son llevados como debe de ser”, señaló Blanca Estela Ceniceros Ibarra.
Explicó que las oficinas en ocasiones están muy llenas, pero que es comprensible porque son muchas las personas que requieren la atención de los abogados.
Comentó que su proceso ha sido llevado por el mismo licenciado y que le ha gustado el trabajo que ha realizado, respetando tiempos y forma en el mismo, además de que no ha detectado alguna irregularidad, como sería la solicitud de dinero.
No se alcanzan los objetivos: Confederación de Colegios y Asociaciones de Abogados de México.
“Todo está lleno de buenas intenciones; sin embargo, no se ha traducido en un verdadero organismo que cumpla con los objetivos que se han planteado”, señaló Manuel Sandoval Maldonado, secretario ejecutivo de la Confederación de Colegios y Asociaciones de Abogados de México.
Comentó que los recursos son pocos; por lo tanto, los sueldos también, lo que provoca que no se reciba la ayuda y apoyo como lo puede brindar un profesional.
“Debe darse más apoyo por parte de Gobierno del Estado, puesto que el recurso que se asigna no es suficiente; hay muchas carencias, no sólo en equipo, sino hasta en papelería y sueldos”, indicó Manuel Sandoval Maldonado.
Aseguró que en el caso del Gobierno Federal se brinda el apoyo adecuado con la aplicación de un presupuesto que responde a las expectativas de la defensoría federal, ya que se mantiene una vigilancia constante sobre los defensores y los sueldos son considerables.
15 defensores de oficio trabajan en la capital de Durango.
Seis mil 260 pesos mensuales reciben por sus servicios.
40 personas al día es el promedio de visitas.
Beneficios
Atención a usuarios
Quienes se acercan para recibir ayuda de los defensores de oficio encuentran diferentes beneficios:
Apoyo en juicios.
Orientación en integración de averiguaciones.
Guía en solución de conflictos legales.
Da seguridad jurídica en los procesos.
Fuente: Instituto de Defensoría Pública del Estado.