Ahmed Qureia, designado como nuevo primer ministro, declaró que Israel debe cumplir con sus obligaciones del plan de paz, o de lo contrario él enfrentará la misma situación insostenible que obligó a renunciar a Mahmoud Abbas.
08 septiembre 2003
Ramala, (EFE).- El presidente del Parlamento palestino, Ahmed Qurea, más conocido por su apodo de Abu Alá, ha aceptado el reto de ser el nuevo primer ministro de la ANP, cargo que ayer le ofreció el presidente Yasser Arafat.
"Abu Alá convocará en los próximos días al Consejo Legislativo palestino (Parlamento) para presentarle su dimisión como presidente y pasar el proceso legislativo de elección como candidato a primer ministro", aseguró a EFE una fuente cercana al nuevo jefe de gobierno.
La convocatoria del órgano legislativo se espera para las próximas 48 horas, tras lo cual el candidato ratificado por los legisladores tendrá hasta cinco semanas para formar gobierno y jurar su cargo.
El presidente del Parlamento había recogido hoy mismo, de manos de Arafat, la carta de designación de primer ministro, y esta noche se reunió de nuevo con él en Ramala, tras lo cual se espera el anuncio oficial.
Por el momento, no se conoce el contenido de esta segunda entrevista, aunque horas antes Abu Alá había condicionado su aceptación del cargo a que tanto EU, la UE, como Israel le dieran garantías de su voluntad de sacar adelante un proceso de paz.
A Israel ha pedido además que cese su política de ejecuciones extrajudiciales y levante sus bloqueos militares en Cisjordania y Gaza. "No quiero ver más puestos de control militares. No quiero ver más asesinatos de palestinos. No quiero ver más demoliciones de casas", afirmó el todavía presidente del Parlamento palestino.
Y también exigió que Israel y Estados Unidos suspendan su política de marginar en un eventual proceso de paz a Arafat, para quien numerosos ministros israelíes piden su destierro. "No puedo ir en esto sin su apoyo (el de Arafat)", dijo Abu Alá a la prensa al pedir que el "rais" sea rehabilitado y que ambos países le retiren su condición de "irrevalente".
Para exponer sus exigencias a la comunidad internacional, Abú Alá, de 66 años, se había entrevistado a lo largo de la jornada en Jerusalén con el representante ruso en el Cuarteto de Madrid, Andrei Vdovin, y el cónsul de EEUU en Jerusalén, Jeff Feldman.
La designación de Abu Alá sigue a la dimisión de el sábado del primer ministro Abu Mazen, ante las reiteradas negativas del presidente de la ANP para cederle el total control de los organismos de seguridad.
El Comité Central de Al-Fatah y el Comité Ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) ratificaron ayer el nombramiento de Abu Alá, quien hoy había dicho que solo aceptaría el cargo si EU y la UE garantizan que Israel cumpla con la Hoja de Ruta. "No estoy dispuesto a ser un fracaso. Quiero saber si es posible la paz o no", añadió.
La UE extendió hoy su apoyo a Abu Alá y el ministro italiano de Exteriores, Franco Frattini, elogió su nombramiento. "Esperamos ver pasos concretos hacia el desmantelamiento de las organizaciones terroristas y que las fuerzas de seguridad palestinas obedezcan a una única autoridad en el Gobierno", dijo Frattini, que es presidente del Consejo de Ministros de la UE.
Añadió que esas decisiones dependerán "de las opciones que tome Abu Alá", e insistió en que se trata de pasos "indispensables" para el éxito de la Hoja de Ruta que promueve la comunidad internacional. Por su parte, Cristina Gallach, portavoz del Alto Representante de Política Exterior y Seguridad Común de la Unión Europea, el español Javier Solana, aseguró Abu Alá es muy respetado por la UE y que puede contar con el apoyo de los Quince. "Es un hombre que cree en la paz con Israel y ha hecho mucho por ella y por tanto obtendrá todo el apoyo de la Unión Europea", aseguró.
Mientras, Israel ya ha asegurado por boca de su ministro de Exteriores, Silván Shalom, que la elección de un primer ministro en la ANP es "un asunto interno palestino" y que de cualquier forma "se le juzgará por los hechos y no por las palabras".