México, DF.- Aun con los logros macroeconómicos, luego de la crisis de 1994, México padece ?rezagos? en su reforma institucional, pues todavía no alcanza ?transparencia? en la impartición de justicia, lo que impide el desarrollo de la actividad privada y genera dudas en los inversionistas, sostuvo el Foro Económico Mundial.
Además, Brasil y México deberán aprovechar su liderazgo para que América Latina avance ?rápido? hacia su unificación, porque sólo así impedirán que el capital se vaya a otras regiones, añadió Arnulfo López, director de Competitividad del Foro.
En el caso mexicano, explicó que ?bajar la inflación en dos o tres años requiere de un poco de esfuerzo -lo han hecho otros países-, pero crear un sistema judicial transparente dependerá de todos?.
En entrevista, el funcionario del organismo mundial subrayó que desde la crisis de 1994 México ha sabido cómo hacer un buen manejo macroeconómico, pero donde está rezagado es en crear un sistema jurídico independiente para que la actividad privada se desarrolle en forma más eficiente.
Las empresas necesitan una situación legal estable que dé confianza en la eficiencia y justicia del sistema jurídico; que cuando haya una divergencia las partes puedan acudir al sistema judicial con la certeza de que obtendrán una resolución justa y eficiente, dijo.
Los países que tienen un esquema legal de esa naturaleza son competitivos, como Finlandia o Noruega, donde el sistema judicial funciona como reloj, pero en las naciones que carecen de él su actividad privada sufre y los inversionistas piensan dos veces si van o no a esos mercados.
El director de Competitividad del Foro dijo que Rusia es un ejemplo, pues a pesar de sus recursos naturales generosos (importante industria petrolera), la inversión extranjera es muy baja, pues no hay interés en operar en donde los jueces no son independientes y los posibilidades de soborno van en aumento.
Destacó que México está mejor que hace diez años, lo que demuestra el porqué las firmas calificadoras internacionales le han dado el grado de inversión. ?Eso es un ejemplo de que un país puede volver a tomar las riendas con buen liderazgo y hacer proyectos importantes después de una crisis.
Incluso, cuenta con un sector privado con una antigüedad de décadas, sofisticado y desarrollado. ?Eso habla bien de las expectativas a futuro?, dijo.
Luego, señaló que la competencia por los flujos inversionistas es cada vez más cerrada y que a América Latina le hace falta tener una visión más amplia, un objetivo común qué perseguir y consideró que el ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas), como está, todavía no es un buen motivador, pues no ha llegado a esa etapa.
En cambio, opinó, el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) es un paso importante para reducir las barreras en el comercio de bienes y servicios. ?Lo importante es que haya un diálogo fluido entre los líderes políticos de los 34 países?, resaltó.