23 septiembre 2003
Washington, (EFE).- Un miembro de la Fuerza Aérea de EU, ex intérprete en el campo de prisioneros en la base de Guantánamo (Cuba), fue acusado hoy de presunto espionaje y de ayudar al enemigo, anunciaron fuentes militares.
Amhad I. Al-Halabi, quien fue intérprete en lengua árabe en Guantánamo, ha sido acusado de 30 cargos, entre ellos espionaje y ayuda al enemigo, y permanece detenido en la base de la Fuerza Aérea Vandenberg de California.
Es el segundo caso de supuesto espionaje que ocurre en esas instalaciones militares de Estados Unidos en los últimos días. El pasado fin de semana, el Pentágono informó de que un asistente religioso militar musulmán que asistía a los presuntos miembros de la red terrorista Al Qaeda y del Talibán prisioneros en Guantánamo había sido detenido por supuesto espionaje.
El Pentágono dijo que los dos hombres se conocían, pero no está tiene claro si la detención de ambos está vinculada entre sí.
Al-Halabi ha sido acusado de nueve cargos relacionados con espionaje, tres presuntamente por ayudar al enemigo, once vinculados a la desobediencia de una disposición legal y nueve por formular declaraciones oficiales falsas.
Este hombre estaba asignado a la base de la Fuerza Aérea Travis, de California donde desempeñaba funciones en una unidad de logística, según dijo un portavoz de las instalaciones aéreas de Vandenberg, el mayor Michael Shavers.
Otras fuentes castrenses informaron de que las investigaciones sobre Al-Halabi continúan en la base naval estadounidense de Guantánamo, donde EU mantiene detenidos a 660 hombres de 43 países sospechosos de pertenecer a Al Qaeda y al Talibán, sin que hasta hoy se les haya formulado cargos.
Estos sospechosos fueron llevados a Guantánamo tras el derrocamiento del gobierno del Talibán de Afganistán, donde EU inició en octubre de 2001 su guerra mundial contra el terrorismo tras los atentados del 11 de septiembre de ese año.
Las autoridades militares han dicho que la difusión de los datos secretos obtenidos durante los interrogatorios a los detenidos en Guantánamo podría tener efectos negativos en la guerra contra el terrorismo, aunque no especificaron si Al-Halabi tenía en su poder esa clase de información.
Al igual que el arresto del asistente religioso para los musulmanes, el capitán James Yee, confinado a una instalación militar de Charleston (Carolina del Sur) desde hace 13 días, el de Al-Halabi también ocurrió en la estación aeronaval de Jacksonville (Florida).
Al-Halabi fue arrestado el 23 de julio pasado, y al día siguiente llevado a la base Trevis de donde se le confinó a la Vandenberg.
En el caso del capellán Yee, todavía no le han sido formulados cargos, y según fuentes militares, podría ser mantenido bajo arresto por más de dos meses como lo estipula el código militar bajo cuya jurisdicción está siendo investigado.
De ser acusado oficialmente de presunto espionaje, Yee, que adoptó al convertir al Islam el nombre de Yousef en vez de James, de 35 años y graduado en la Academia Militar de West Point (Nueva York), puede ser presentado ante una corte marcial o afrontar sanciones administrativas, y en última instancia, recuperar su libertad.