Once incendios en el bosque con impactos en 320 hectáreas se han registrado hasta el momento, según dio a conocer un informe estadístico de la gerencia regional de la Comisión Nacional Forestal en el estado de Durango, mientras que al mismo período del año pasado estaban contabilizados 16 siniestros de este tipo, con daños en 219 hectáreas.
En el arranque de la temporada de conflagraciones de este año, los municipios de Pueblo Nuevo, San Dimas, Durango, Mezquital y Canatlán han sido los principales afectados, aunque destaca el primero con siete incendios registrados hasta el momento.
De acuerdo con los pronósticos climatológicos, los meses de abril y mayo serán de alto riesgo en la temporada de incendios forestales, de tal manera que se han rentado el servicio de un helicóptero para monitorear la zona y detectar con mayor eficiencia los conatos de fuego en el bosque, según lo asentó la Conafor.
En cuanto a la temporada 2002, la dependencia en cuestión aseveró que se registraron 322 incendios con un daño en 17 mil 678 hectáreas distribuidas en distintas municipalidades, pero con mayor incidencia en Pueblo Nuevo, Durango, Santiago Papasquiaro, Tepehuanes y Topia.
De manera particular, el informe de la Conafor indicó que en el 2002 Pueblo Nuevo se colocó en el primer lugar de incendios forestales, con un registro de 109 siniestros de este tipo, es decir, el 34 por ciento de los siniestros totales contabilizados.
En segundo lugar se ubicó Durango con 39 incendios, le siguió Santiago Papasquiaro con 15, 13 en Tepehuanes, otra cantidad igual en Topia, 12 en Otáez y 9 en Guanaceví, en tanto que los restantes 112 se ubicaron en el resto de las municipalidades.