La reunión sostenida en el Centro Empresarial de la Laguna entre representantes de la Comisión Nacional del Agua y campesinos de la cuenca del Río Aguanaval, constituye un buen esfuerzo de concertación. Lo anterior porque aún continúa el debate en torno a la conveniencia de que el Gobierno Federal construya o no, las presas en los cañones de El Tigre y La Cabeza, a la luz de su costo-beneficio y su impacto ambiental.
En cuanto a los argumentos a favor, existe el de controlar las aguas broncas del impredecible Río, tanto para optimizar su aprovechamiento para usos agrícolas, como para proteger las poblaciones ribereñas. Por lo que hace a los argumentos en contra, sobresale lo escaso del aprovechamiento en orden al aforo histórico promedio y el resultado negativo que implicaría la retención artificial de las aguas, en función de la recarga del acuífero.
Resulta destacada la participación de Coparmex como organismo intermedio convocante, así como de las autoridades de Conagua, habitantes y productores agrícolas ribereños y asociaciones ecológicas. No existe al respecto una solución simple; los argumentos en pro y en contra soportados en estudios técnicos de viabilidad e impacto ambiental, integran un voluminoso expediente de cinco mil hojas.
El la reunión las partes expusieron sus puntos de vista que deberán ser tomados en cuenta en orden a una decisión final, que además de la conveniencia de obtenerse en consenso, esperamos sea la mejor. Lo anterior porque con independencia de la importancia que tiene el recabar todas las opiniones, lo deseable es que la resolución a que se llegue sea la que convenga al bien común de la región.