POR LUIS MORALES CORTÉS
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- La “División” de Estudios Superiores volvió a presentarse, ahora los alumnos de licenciatura del Instituto “18 de Marzo” tomaron las instalaciones de la escuela que recién acababa de entregar un grupo de maestros.
Desde las 5:30 horas, un reducido número de alumnos se posesionaron del plantel, los integrantes de una comisión se unieron al director Juan Carlos Padilla Valdivia, quien viajó a Durango para entrevistarse con las autoridades de educación.
Brenda Cecilia García Flores, alumna del décimo semestre de la División de Estudios Superiores, informó que la principal demanda de sus compañeros es el nombramiento de un director ajeno a los grupos políticos formados por los maestros que se disputan el poder.
“Nosotros queremos clases, sabemos que al cerrar la escuela no hay labores, pero tenemos que ser drásticos si queremos que los maestros cumplan en sus aulas”, dice la joven estudiante.
Otra compañera que permanecía dentro de la escuela y que prefirió no proporcionar su nombre, manifestó que desafortunadamente el dialogo se ha agotado entre las partes del conflicto.
Necesitamos la Ley Orgánica
Ricardo Larrea Reza, trabajador en el nivel de secundaria del Instituto “18 de Marzo”, manifestó que los alumnos que tomaron la escuela consideran a su juicio que son muchos los maestros que incumplen en sus clases.
Sobre la postura de los educadores, Larrea Reza manifestó que en el plantón realizado por sus compañeros la mañana del 24 de febrero, las demandas iban encaminadas a la aprobación de la Ley Orgánica del plantel.
Los maestros entregaron las instalaciones a las 19:00 horas y acordaron enviar una comisión a Durango para que tramite la solución del conflicto que ya ha interrumpido en varias ocasiones las actividades escolares.
Como se informó en su oportunidad, Gabriela Ruelas Guevara, asesora jurídica y encargada de la Comisión de Leyes y Reglamentos de la delegación sindical D-II-2 de la sección 44 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación dijo que lo único que ha faltado es la voluntad del encargado del Ejecutivo para que se apruebe el anteproyecto de Ley que permitirá dar legalidad a la División de Estudios Superiores.
Por su parte, Rubén Darío Carranza, secretario general de la delegación dijo que ésta había actuado como mediadora entre los maestros de la División y las autoridades educativas, pero considerando que el problema ya se había desbordado, determinaron encabezar el cierre de las instalaciones, a cuya protesta se sumó todo el personal docente y administrativo del Instituto.
Refirió que la integración de la Junta Directiva de la División que se realizó en días pasados con la presencia del secretario de Educación, Adrián Laveaga, sólo fue un acto protocolario y no representa ninguna garantía de que el nivel de estudios superiores será reconocido legalmente como parte de esa institución.
Ello, debido a que no se realizó el nombramiento del subdirector de la División, y a que la Junta Directiva no volverá a reunirse hasta después de seis meses, lapso en el cual no se puede continuar operando sin tener una autoridad encargada.