SUN-AEE
MÉXICO, DF.- A un mes de que se renueve la dirigencia del Congreso del Trabajo, Leonardo Rodríguez Alcaine pretende reelegirse por cuarto año consecutivo, a pesar de que violaría los estatutos y provocaría que la Secretaría del Trabajo le negara la toma de nota -reconocimiento oficial-.
Ante ello, tres dirigentes sindicales han manifestado su interés por ocupar la presidencia de ese organismo como son: Napoleón Gómez Urrutia, del Sindicato Minero, Antonio Reyes, del Sindicato de Fonacot, y Enrique Aguilar Borrego, del Sindicato de Trabajadores Bancarios.
Mario Suárez García, secretario general de la Confederación Revolucionaria de Trabajadores (CRT), dijo que en los dos últimos años de gestión de Rodríguez Alcaine al frente del Congreso del Trabajo solo convocó a una sola reunión de pleno.
Y esto, agregó el líder fundador del Congreso del Trabajo, fue para comunicar a los dirigentes sindicales que había acordado con el secretario del Trabajo Carlos Abascal reformar la Ley Federal del Trabajo.
Leonardo Rodríguez Alcaine cumple este 18 de febrero su tercer período como presidente del organismo en una situación de violación de los estatutos acordados en el año 2000.
En los documentos básicos se acordó períodos de un año con opción a una sola reelección por un año, sin embargo, Rodríguez Alcaine aprovechó de que el Congreso del Trabajo no tenía registro ante la autoridad laboral para solicitar la toma de nota al comité que ha encabezado durante los últimos tres años.
En febrero próximo cuando el Congreso del Trabajo cumpla su 37 aniversario se tendrá que renovar la presidencia y vicepresidencia que actualmente ocupan Leonardo Rodríguez Alcaine y Antonio Reyes.
A este último como aspirante se le suman Napoleón Gómez Urrutia y Enrique Aguilar Borrego.
Mario Suárez García dirigente de la Confederación Revolucionaria de Trabajadores ha dicho que “sería ilegal” una reelección más de Rodríguez Alcaine al frente del organismo cúpula del sector obrero.
Además, el Congreso requiere de una dirigencia con mayor movilidad, pues en este año se podría someter a discusión la reforma de la Ley Federal del Trabajo, a lo que muchas organizaciones sindicales no están muy de acuerdo.
Asimismo, una reelección más de Rodríguez Alcaine lo colocaría fuera de la legitimidad en su cargo, pues los estatutos se violentarían y la autoridad no podría otorgarle la toma de nota.S113 SUN/VHA/AEG _Reut 0