Reuters
México, DF.- El banco central mexicano redujo ayer por tercera vez en el año su proyección de crecimiento para 2003, que quedó en 1.5 por ciento desde un previo de dos por ciento, por una continuación de una débil demanda por productos de México en Estados Unidos.
El Banco de México, autónomo del gobierno, también anticipó una expansión del Producto Interno Bruto (PIB) de entre tres y 3.5 por ciento para 2004, aunque reconoció que ese nivel aún está por debajo del potencial de crecimiento económico.
México vende cerca de un 85 por ciento de sus exportaciones a Estados Unidos, donde el repunte de la producción manufacturera ha sido más lento que en la salida de otros ciclos recesivos y donde México también ha debido afrontar una fuerte competencia de China.
?Para este año estamos nuevamente dando una cifra en términos de que el crecimiento va a ser de alrededor de 1.5 por ciento?, declaró a periodistas el director general de investigación económica del banco central, Manuel Ramos.
El funcionario dijo que la economía mexicana, la segunda mayor de América Latina, no ha logrado responder con agilidad para atenuar los impactos negativos provenientes de Estados Unidos.
El combustible para la economía mexicana que llegó con el tratado de libre comercio con Estados Unidos y Canadá, que se puso en marcha hace casi diez años, se está acabando.
?El impulso al crecimiento que México obtuvo con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte durante la segunda mitad de la década de los años 90, ha venido agotándose?, señaló por su parte un informe del banco.
El consumo en México ha compensado la fuerte caída en la inversión en maquinaria y equipos y construcción, comentó Ramos.
Reformas clave
Ramos dijo que es necesario impulsar una serie de reformas estructurales para fortalecer el sector interno de la economía del país, una visión compartida con el presidente Vicente Fox.
Para el gobierno mexicano, las reformas fiscal, energética y laboral, que se espera sean discutidas por el Congreso dominado por la oposición, son esenciales para apuntalar el crecimiento económico local.
?Seguramente habrá grandes, importantes, intensos debates sobre lo que debemos de hacer como país para estas próximas semanas, estos próximos meses y estos próximos años?, declaró Fox durante una ceremonia en la residencia presidencial de Los Pinos.
El Banco de México comenzó el año con una expectativa de expansión de tres por ciento para la economía del país, pero en abril y en julio la revisó a la baja a 2.4 y dos por ciento, respectivamente.
El ministro de Hacienda, Francisco Gil, dijo hace unos días que estimaba un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de 1.6 por ciento este año, en línea con lo proyectado por analistas del sector privado y nacional encuestados por el Banco de México.
A mediados de octubre, la Secretaría de Hacienda recortó su pronóstico de crecimiento económico de México para 2004 a 3.1 por ciento desde el 3.5 por ciento calculado a principios de mes.
El gobierno mexicano difundirá el 14 de noviembre el comportamiento del PIB del tercer trimestre, para el cual 12 analistas consultados por una agencia de noticias internacionales estiman una expansión promedio de 1.30 por ciento.