Agencias
WASHINGTON, EU.- El presidente Hugo Chávez amenazó ayer a los industriales con tomar militarmente las plantas de producción de alimentos, si persisten en mantener el paro nacional opositor que cumplió 40 días.
Chávez dijo que no permitirá que la “oligarquía” vaya a “asesinar de hambre al pueblo”, y pidió a los altos oficiales prepararse para “tomar militarmente las plantas de producción de alimentos que haya que tomar”.
“Si tuviéramos que llegar al extremo, en el marco de la constitución, de ordenar que sean requisados los depósitos donde tienen el maíz, el arroz acaparado, yo lo voy hacer”, expresó el mandatario.
Acusó al sector privado de promover un “golpe económico” para tratar de “negarle al pueblo alimento, la medicina y hasta el agua”, pero sostuvo que “no lo van lograr”.
La mayor cámara de empresarios extranjeros del país cuestionó las declaraciones del mandatario, y señaló a sus mil afiliados que “al amparo de la constitución no procede acción alguna sin el correspondiente proceso judicial”.
La Cámara Venezolano Americana de Comercio e Industria (Venamcham) emitió ayer un comunicado donde exhorta a las empresas afiliadas a denunciar ante la organización y las embajadas respectivas si son objeto de amenazas por los militares.
El dirigente empresarial Rafael Alfonzo rechazó las acusaciones de Chávez, y sostuvo que el “único culpable” del desabastecimiento de alimentos es el gobierno debido a que nunca atendió las alertas que se hicieron desde el dos de diciembre sobre los problemas de combustible para distribuir los productos. Estados Unidos apoya la creación de “un grupo de amigos” de Venezuela para tratar de solucionar la crisis entre el presidente Hugo Chávez y la oposición que ha interrumpido las exportaciones de petróleo con una huelga, dijo ayer un funcionario estadounidense.
Mientras tanto Washington espera que la idea pueda sustentar los esfuerzos del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, para poner fin a la crisis entre el presidente izquierdista de Venezuela y la oposición que desea sacarlo del poder, añadió el funcionario.
Estados Unidos brindó su apoyo a la idea, en parte, porque los esfuerzos de Gaviria hasta el momento para poner fin a la huelga, que ya lleva 40 días y ha interrumpido las exportaciones de petróleo del quinto exportador de crudo en el mundo, no han tenido éxito.
Estados Unidos espera que una acción de otras naciones en la región podría hacer que ambas partes alcanzaran un acuerdo.
Los huelguistas quieren que Chávez, acusado por sus opositores de autócrata, renuncie y celebre elecciones antes de tiempo, algo que el mandatario venezolano se niega a hacer.
“¿Estamos tratando de hallar una forma de despejar el atolladero? Por supuesto. Deseamos encontrar una vía para poner fin a la crisis política”, dijo el funcionario estadounidense, quien no quiso ser identificado, y añadió que Estados Unidos considera que hay necesidad de una “solución electoral” para permitir que los venezolanos expresen sus puntos de vista.