10 septiembre 2003
Los Angeles (EEUU), (EFE).- Los actores Jennifer López y Ben Affleck han confirmado el aplazamiento de su boda dada la excesiva atención que había recibido la ceremonia prevista para el domingo, fecha que curiosamente nunca habían llegado a confirmar.
"Ante tanta atención de los medios de comunicación hemos decidido posponer la fecha", corrobora un comunicado difundido hoy en Los Angeles y que parece el último capítulo en la boda del año, al menos por el momento.
Desde que López, 33 años, y Affleck, 31, dieron a conocer su compromiso de boda, la fama de ambos les ha perseguido hasta el altar, momento que parecía estar previsto para el próximo domingo en la localidad costera de Santa Bárbara, al norte de Los Angeles, en lo que querían que fuera una ceremonia privada para 400 invitados.
Junto a ellos, un ejército de periodistas se dio la voz en los últimos días, apostados en esta localidad para ofrecer más información sobre este esperado enlace, desde el traje de novia, supuestamente de Vera Wang, hasta el nombre del padrino, el hermano del novio, Casey Affleck.
"Cuando nos vimos estudiando la posibilidad de contratar a tres diferentes novias falsas en tres lugares diferentes nos dimos cuenta de que algo iba mal", añade el comunicado.
Algunos de los supuestos invitados a la ceremonia han corroborado la nota, que algunos periodistas del corazón consideran una nueva treta para crear aún más confusión sobre la boda.
"Empezamos a darnos cuenta de que el espíritu del que debería de ser el día más feliz de nuestras vidas podía estar en peligro", añade.
Fuentes sin confirmar han señalado que la boda podría celebrarse en un futuro cercano de forma mucho más íntima, con los miembros más allegados de la familia como únicos invitados.
Las mismas fuentes también han aclarado que se trata de un aplazamiento y no de una cancelación ya que la pareja sigue muy unida.
Cuando quiera que se celebre la boda de esta pareja, esta será la primera para Affleck y la tercera para López, casada anteriormente con el modelo Ojani Noa y con el coreógrafo Chris Judd.