16 octubre 2003
Naciones Unidas, (EFE).- El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó hoy por unanimidad la resolución que establece una fuerza multinacional para Iraq, bajo mando único de Estados Unidos, y que pide apoyo financiero para la reconstrucción.
La resolución, en la que el miércoles se introdujeron cambios muy ligeros en el último minuto que obligaron a posponer a hoy la votación, fue adoptada con el apoyo de los quince miembros del Consejo.
La aprobación estaba garantizada tras la decisión de Rusia, Francia y Alemania de respaldarla, pese a tener algunas reservas sobre el texto.
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, quien asistía a la votación, aseguró en el plenario del Consejo que hará "todo lo que está en su poder" para cumplir el mandato que se le ha encomendado, "siempre que las circunstancias lo permitan".
Annan subrayó que el proceso que ha llevado a la adopción de esta resolución ha sido "difícil", pero los resultados muestran el interés de todos en la reconstrucción y en que haya un Iraq democrático lo antes posible.
En su opinión, no hay duda de que todos los países están a favor "de un rápido traspaso de la soberanía" a un gobierno provisional "lo antes posible" y dijo que el éxito del proceso ayudará a estabilizar la región.
La resolución reafirma la soberanía e integridad territorial de Iraq y el derecho de los iraquíes a determinar libremente su futuro, pero no establece plazo alguno para el fin de la ocupación ni para la devolución de los poderes a los iraquíes.
El único plazo contemplado es el del 15 de diciembre, fecha máxima para que el Consejo de Gobierno iraquí -integrado por 25 representantes de los diferentes grupos étnicos, religiosos y políticos designados por Estados Unidos-, presente un calendario y un programa para la transición.
Dicho programa debe incluir la elaboración de una nueva Constitución y la celebración de elecciones democráticas que llevarán a la formación de un gobierno representativo.
El mandato de la fuerza multinacional expirará cuando ese nuevo gobierno preste juramento y asuma sus funciones, a menos que el nuevo gobierno solicite al Consejo su mantenimiento.
La resolución reconoce que "el Consejo de gobierno y sus ministros son los elementos principales de la administración interina iraquí, que, sin perjuicio a su futura evolución, encarnará la soberanía del Estado de Iraq durante el período de transición".
Además, pide que las potencias ocupantes, a las que se denomina Autoridad, devuelvan las responsabilidades de gobierno a los iraquíes "tan pronto como sea factible" y que informen al Consejo de Seguridad de los avances en este terreno.
La ONU debería reforzar "su papel vital" en Iraq, tanto en lo que se refiere a la ayuda humanitaria, como a la reconstrucción económica, el restablecimiento de instituciones locales y de un gobierno representativo.
La resolución pide un mayor apoyo financiero para la reconstrucción de Irak y para su desarrollo y, más concretamente, insta a que los países comprometan donaciones "sustanciosas" en la conferencia que se celebrará en Madrid la semana próxima.