04 septiembre 2003
BRASILIA, (AP).- Con una amplia mayoría y después de 16 horas de intensos debates con la oposición, el frente gobiernista en la Cámara de Diputados aprobó la madrugada del jueves la reforma al sistema tributario de Brasil.
El presidente de la Cámara de Diputados, Joao Paulo Cunha, registró 378 votos a favor y 53 en contra de los 431 parlamentarios que permanecieron en el plenario hasta la madrugada. Solamente eran necesarios 308 para aprobar la reforma.
El dirigente de la bancada parlamentaria gobiernista Aldo Rebelo dijo que la reforma tributaria "contribuirá al ordenamiento económico del país". Para su aprobación, el gobierno negoció hasta medianoche del miércoles con la oposición, el sector privado y los gobernadores de los estados.
Rebelo manifestó que los cambios "no modifican la columna vertebral de la propuesta para la vigencia de un sistema tributario ordenado y equitativo". Los empresarios temían que la reforma cargue sobre sus espaldas más impuestos y no cree condiciones para incrementar la producción y las exportaciones.
Los gobernadores exigieron una mayor participación en las recaudaciones impositivas que van en su totalidad al gobierno federal. El gobernador del estado de Minas Gerais, Aecio Neves, señaló que los gobiernos regionales necesitan de parte de esas recaudaciones para invertirlas en el desarrollo.
Los gobernadores de los estados del noreste, la región más empobrecida del país, exigieron la incorporación de fondos de compensación que equilibren el desarrollo nacional.
La oposición, representada por el Partido del Frente Liberal y el Partido Social Demócrata Brasileño, exigió más tiempo de discusión de la reforma para darle un mayor contenido social y establecer la dirección de las inversiones estatales.
Finalmente, la propuesta de reforma tributaria gubernamental pasó la primera prueba. Tras debatir el jueves algunos puntos de detalle, la reforma será enviada al Senado para su revisión.
Esta es la segunda reforma enviada al Congreso por el gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva durante los últimos cuatro meses. La primera fue la relacionada con el régimen de seguridad social y de pensiones que está en revisión en la Cámara de Senadores tras el aval de los diputados.
Lula subrayó que espera que ambas reformas sean promulgadas antes de fines de año. Adelantó que en el 2004 enviará al Congreso proyectos de reformas constitucionales y a los regímenes de justicia, trabajo, política y otros.