“Doña Jose” tiene en su haber varias denuncias anónimas por la distribución de estupefacientes y le cumplimentan orden de aprehensión
TORREÓN, COAH.- En atención una orden de aprehensión, Josefina Aguilera Cháirez fue detenida ayer por la mañana por elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI), señalada como una de las principales distribuidoras de droga en la colonia Abastos. Quedó a disposición del Ministerio Público de la Federación.
“Doña Jose” como se le conoce en ese amplio y populoso sector habitacional, tiene 48 años de edad y su domicilio se ubica en privada Nueva Rosita No. 109, en donde se dedicaba a la venta de estupefacientes a los viciosos que acudían, según se hace constar en varias denuncias anónimas y señalamientos de algunos de esos compradores.
Fue el 16 de mayo del año en curso, cuando agentes de la Dirección General para la Investigación del Secuestro y Crimen Organizado del Estado (DGISCOE), lograron detener a Juvenal Hernández Reza, momentos después de haberle comprado a “Doña Jose”, 15 “grapas” de cocaína.
La captura se realizó a las 14:30 horas de ese día, cuando los policías observaron que por la privada Nueva Rosita de la colonia Abastos, salía Juvenal del domicilio marcado con el No. 109, llevando una bolsa de plástico negro que apretaba con su brazo izquierdo contra su pecho, por lo que le marcaron el alto para su investigación.
Los ministeriales solicitaron que se identificara y el detenido manifestó llamarse Juvenal Hernández Reza, de 28 años de edad, domiciliado en calle Francisco Márquez No. 117 de la colonia Abastos.
Al realizarle una revisión corporal, se encontró que en el interior de la bolsa de plástico negro llevaba una botella de cerveza tamaño familiar, en cuyo interior traía 15 pequeños envoltorios de papel de revista y en cada uno de ellos una cantidad de un polvo blanco con las características de la cocaína.
Juvenal aseguró a los agentes que la droga la había comprado a una señora, propietaria del domicilio del cual salió momentos antes y que se llama Josefina Aguilera Cháirez, quien desde hace tiempo se dedica a esta ilícita actividad y surte a todos los viciosos del sector.
También manifestó que las 15 “grapas” las compró en la cantidad de $750.00, dinero producto del trabajo que hace con el yerno de Josefina, como cargador de gallinasa. Aseveró además que es adicto al alcaloide.
Tras realizar las investigaciones pertinentes, se giró una orden de aprehensión contra “Doña Jose”, por el delito contra la salud en su modalidad de comercio, en la hipótesis de venta de cocaína, misma que fue cumplimentada ayer a las 11:30 horas por agentes federales en las inmediaciones de la colonia Abastos.
La detenida quedó a disposición del Ministerio Público de la Federación que ya integra la averiguación previa correspondiente para su posterior consignación.
Hermetismo sobre “La Vicky”
Como ya es costumbre, autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR) se niegan a proporcionar información de los avances en la investigación para la captura del capo de la droga Víctor Manuel Ramírez Moreno, mejor conocido en el bajo mundo como “La Vicky”.
Este individuo es señalado en los medios policíacos, como el que mantiene el control de la venta de estupefacientes en un gran número de cantinas y cervecerías del centro de la ciudad.
De aproximadamente 30 años de edad, con domicilio en Primera Rinconada No. 68 de la colonia La Unión, protagonizó un incidente con varios elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), el año pasado e incluso fue arrestado por alterar el orden en la vía pública.
El tres de diciembre de 2002, agentes de la Policía Preventiva a bordo de la unidad 35363, le marcaron el alto a un tipo para investigar el vehículo en el que viajaba, por lo que de inmediato se puso a la defensiva y asumió una actitud francamente agresiva. Esto fue a las 13:45 horas frente a la escuela “Oficial del Centenario”.
El citado individuo lanzó improperios contra sus captores, además de amenazas de muerte para el jefe operativo de la DSPM de entonces, Alfonso Guevara Montalvo, así como a Jesús Jasso Fraire, director de la Policía Preventiva y de todo aquél que se acordaba, diciendo que no sabían “con quien se meten”.
El escándalo fue tan grande que tripulantes de la unidad 35334 que pasaban por el plantel educativo, acudieron para apoyar a sus compañeros que interrogaban al sujeto visiblemente agresivo, por lo que se detuvieron para asegurarse que no alterara el orden, pues se hallaban en la vía pública.
Cuando descendieron de la patrulla, el individuo comenzó a insultar a los recién llegados, diciéndoles con palabras altisonantes que no molestaran y que “si quieren balazos y muertes las van a tener, de civiles o uniformados, es lo único que están buscando, que al cabo ya varios han caído”.
Ante tales amenazas, los elementos de la DSPM remitieron al sujeto a la ergástula municipal, donde “La Vicky”, quedó a disposición del Juez Calificador y con la módica suma de cien pesos logró su libertad.
En el boletín informativo que se generó en Seguridad Pública, se asentó que Ramírez Moreno dijo a los agentes que iba a juntar dinero para mandar matar al inspector y además mencionó que no se dedicaba a hacer aletazos, sino que presumió de ser vendedor de cocaína.
FUENTE: Archivo de El Siglo de Torreón