MÉXICO, DF.- El mediocampista argentino Mario Grana, quien ahora juega con el Zacatepec de la Primera División A, denunció que la Federación Mexicana de Futbol (FMF) no se quiere hacer cargo de los salarios que adeuda la directiva de Colibríes de Cuernavaca.
“(El adeudo que tiene Colibríes) está un poquito raro porque la federación no se quiere hacer responsable, dicen que no vendieron la franquicia, sino que vendieron el espacio”.
Agregó que “me parece un poco un raro, pero creo que nos tiene que responder porque somos trabajadores del futbol, y si la federación dejó estar a Colibríes también se tiene que hacer responsable de pagarnos, porque nosotros trabajamos todo ese tiempo”, comentó.
Consideró que no es justo “que después de defender una camiseta, de dejar hasta lo último en la búsqueda de no descender, que ahora un equipo deba cuatro meses y medio a mí, y tres meses a otros”.
Anunció que antes de que empiece el Campeonato Apertura 2003 buscará con todos sus ex compañeros de Colibríes entrevistarse con el presidente del máximo circuito, Víctor Garcés, para buscar una solución al respecto, y que prefiere no tener líos, por ello su decisión de no ir aún ante la FIFA o de interponer una demanda.
“Nosotros vamos a ir a la federación tranquilos, yo creo que en algún momento van a entrar en razón, entenderán que nosotros estamos pidiendo algo justo”; indicó.
Aún cuando la Comisión del Jugador no les ayudó durante el pasado draft de jugadores, Grana confía en que dicho organismo funcione y pueda apoyar no sólo a los jugadores del equipo morelense, sino también a otros futbolistas que tengan problemas con directivas.
“Lo único que quiero es que los jugadores que estuvimos en Colibríes, que nos matamos y aguantamos muchas cosas, que por lo menos podamos cobrar algo de nuestro sueldos. A mí me deben cuatro meses, porque a raíz de que salí un poquito en la tele no me quisieron pagar”, comentó.
El mediocampista señaló que luego de esas declaraciones, en las que habló de los adeudos salariales de la directiva del cuadro morelense, que encabezaba Jorge Rodríguez, ya no quiso hablar con él, sólo escuchó que si la federación le quitaba la franquicia ellos tendrían que arreglar el cobro de sus salarios con la FMF.
Lo extraño del asunto, reiteró el argentino, “es que nos han dicho que la franquicia no se ha vendido, que ha quebrado, que han vendido el espacio que ha quedado, y me parece que están jugando a las escondidas”.
Agregó que “creo que van a entrar en razón y van a defender a los jugadores por que nadie ha hecho una demanda, sólo estamos pidiendo que responda por algo que nos corresponde”.
Dijo que la entrevista con Víctor Garcés buscará obtenerla de forma grupal y no individual, aunque ahora será más complicado, pues ya cada quien está en su nuevo equipo y reunirse no será sencillo, pero insistió en quien aún tiene la confianza de que los jugadores podrán recibir finalmente lo que se les adeuda.