SUN-AEE
México, DF.- La Secretaría de Economía (SE) reconoció que se espera un impacto ?importante? en la importación de vehículos nuevos a partir de 2004, pero alertó a los potenciales compradores de los ?riesgos? que podría implicar tales adquisiciones, desde impuestos más elevados y nula asistencia técnica.
Asimismo, aceptó que se corre el riesgo de que muchas unidades no se inscriban en el registro de importación que entrará en vigor a partir del primero de enero de 2004, con perjuicio a la hacienda pública.
Humberto Jasso, director general de la Industrias Pesadas y Alta Tecnología, de la Secretaría de Economía, recordó que a la fecha más de la mitad de los autos que se venden en las agencias y distribuidoras son importados por las mismas fábricas, lo que asegura garantía, refacciones y servicio.
?Eso ha permitido que el número de modelos haya crecido de 58 modelos registrados en la Secretaría de Economía en 1994 a 320 el día de hoy?, refirió en entrevista.
Agregó que México exporta 75 por ciento (un millón 300 mil carros) de lo que se produce en las plantas instaladas aquí, por lo cual la oferta interna se cubre en más de la mitad por autos ya importados por agencias.
Jasso dijo que sólo Peugeout envió solicitudes de importación, con los pedidos estarían inscritos en la Dirección General de Aduanas, las secretarías de Hacienda y de Economía.
Comentó que hay otras dos solicitudes de empresas ligadas al autofinanciamiento, y para quienes ya no es negocio esta forma de comercio, porque las propias distribuidoras y fabricantes están ofreciendo muchas facilidades y financiamientos.
En este caso, añadió el funcionario, el que importó el auto es legalmente responsable de dar el servicio y cumplir con las normas de comercialización y las disposiciones de la Procuraduría Federal del Consumidor.
Luego, alertó que aun cuando los carros importados en forma individual sean de la misma marca de los que se expenden en el mercado mexicano, estas no tienen la obligación de prestar servicio.
Incluso, expuso que en Estados Unidos los autos de ocho cilindros están de moda porque la gasolina es más barata allá, cuentan con infraestructura adecuada y los límites de velocidad son más altos.
Pero si un carro similar llega aquí puede no encontrar refacciones, ni el servicio correspondiente, por lo que tendrá que esperar tiempo para solucionar los problemas con su auto importado.
Jasso destacó que no hay muchas solicitudes de importación dadas de alta, lo que es ?irresponsable?, pues esa información debe llegar incluso a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y a los gobiernos de los estados.
?Pero el problema que hay con esta apertura es que el vendedor estadounidense tiene su lista de precios antes de impuestos y a la hora que llegan a la caja se ven lo que se tiene que pagar de diferencia?, resaltó.
?Así que los mexicanos que pretendan comprar un auto allá, deben tener muy claras esas especificaciones y considerar que el precio en exhibición no es el real, porque faltan los impuestos?, señaló.
Comentó que la competencia mundial es muy grande, pues la tendencia es que haya menos ?jugadores?. Por ejemplo General Motors compró a Fiat.
Volkswagen fabrica aquí el Jetta y el Beatle y de esa producción exporta 80 por ciento; de Brasil importa el Pointer, para el mercado barato, el Audi alemán, para el mercado caro y el Seat para el mediano. Pero exporta el doble de lo que importa.
Daimler Chrysler es el caso extremo. En Toluca fabrica el PT Cruiser, y en Saltillo la Ram. De eso exporta 97 por ciento, pero para el mercado barato importa autos de Corea; para el caro, el Mercedes Benz, de Alemania, y el Dodge para los consumidores medios.
Durante 2003, se vendió casi un millón de autos nuevos y se espera el mismo comportamiento para 2004.