Notimex
Washington, EU.- La administración Bush emitió ayer una decisión oficial que permitirá a México y Ecuador vender de inmediato su atún en Estados Unidos con la etiqueta ?delfín a salvo? si en su pesca se evita la muerte o daño a los delfines.
El Departamento de Comercio (DOC) estadounidense determinó que la pesca de atún con lance de redes sobre delfines en el Pacífico Oriental carece de ?impacto adverso significativo? sobre los delfines, por lo que puede ingresar al país.
?La decisión reconoce el trabajo de Estados Unidos y de los pescadores internacionales bajo el Comisión Interamericana del Atún Tropical (CIAT)?, dijo en rueda de prensa telefónica el director de Pesca de la Administración de Océanos del DOC, Bill Hogart.
La acción de la administración Bush allana el camino para la implementación plena del levantamiento del embargo atunero aprobado en 1999, que permitió desde entonces a México y otros países vender su atún aquí pero sin la etiqueta Delfín a Salvo.
La pequeña etiqueta es vista como clave para la comercialización del atún en lata, toda vez que su ausencia abre el potencial de boicots de consumidores o de las propias empresas importadoras.
Pero la decisión sólo será aplicable a aquellos países que tengan una ?certificación positiva? del DOC, que implica que sus flotas atuneros cuentan con observadores y un sistema de registro de las ocasiones en que los delfines mueren o son heridos en la pesca.
Hasta ahora sólo México y Ecuador gozan de la ?certificación positiva? del DOC, por lo que pueden vender su atún de inmediato.
Sin embargo sólo podrá portar la etiqueta ?Delfín a Salvo? aquel atún en cuya pesca no hayan muerto o sido heridos los mamíferos. El resto del atún también podrá ingresar al mercado estadounidense, pero sin la etiqueta.
Mark Palmer, del proyecto de conservación de delfines del Instituto Isla de la Tierra (EII) de San Francisco, dijo a Notimex que su grupo interpondrá tan pronto como el jueves o viernes una demanda para impedir la entrada del atún mexicano y ecuatoriano.
EEI planea hacerlo ante el magistrado Thelton Henderson, quien impuso los embargos originales en 1990 y que en la práctica ha impedido el ingreso generalizado del atún a pesar del levantamiento posterior de los embargos desde 1999.