POR MARÍA ELENA HOLGUÍN
EL SIGLO DE TORREÓN
Es necesario respetar la autonomía del individuo, afirma la directora del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM
TORREÓN, COAH.- Los recursos que el Gobierno Federal destina a los programas de ayuda social, deben estar ajenos a las variables o fluctuaciones económicas, consideró Paulette Dieterlen, directora del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Refirió que para erradicar la pobreza deben tomarse en cuenta dos aspectos: el económico y el ético, este último relacionado con la autonomía del individuo, la cual no se puede lograr si sólo se concreta a sobrevivir ni se satisfacen las necesidades básicas de alimentación, salud y educación.
“La gente pobre se ve humillada por esa falta de autonomía y aquí el factor de mayor importancia es la educación”, consideró.
Refirió que los programas del Gobierno Federal encaminados a la ayuda social son valiosos, pero es necesario que no estén sujetos a los cambios constantes en la economía, lo que se resiente en la reducción de partidas presupuestales a instancias de los gobiernos Estatal y Municipal.
Por otra parte, expuso que los mexicanos estamos acostumbrados a exigir derechos dentro de esta nueva cultura que impera, pero difícilmente “nos concebimos como ciudadanos con obligaciones, dentro de las cuales también está el exigir a las instancias de gobierno que cumplan con su función de atacar los márgenes de pobreza”.
En este sentido dijo que es necesario analizar los derechos constitucionales y los mecanismos que los hacen exigibles, pues no todos se pueden demandar a tal grado.
Consideró que por desgracia, los esfuerzos no han sido suficientes y la cantidad de pobres en México crece en forma alarmante, aunque esto se atribuye a aspectos como la geografía complicada que caracteriza al país y a estructuras culturales que prevalecen con el paso del tiempo.
Paulette Dieterlen obtuvo la Licenciatura en Filosofía por la Universidad Iberoamericana, la Maestría y el Doctorado en la misma disciplina.
Desde 1992 ha dado clases en diversas instituciones educativas del país y desde 1983 imparte clases en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM.