Torreón, Coah.- Con mucha modestia asegura ?Yo nunca tuve necesidad de buscar viejos, siempre me buscaron a mí?.
Aunque su cara es angelical y su figura parece frágil, la actriz de Tv Azteca Bárbara Mori, se distingue por ser clara al hablar y dura con sus comentarios... cuando así lo considera. Lo mismo reclama la inestabilidad a que están sometidos los actores al estar realizando un trabajo en televisión; cuenta los altibajos que sufren los artistas en su carrera o asegura que en algunos momentos de su vida la han agobiado los hombres.
?Tuve la suerte de no verme nunca en la necesidad de tener a un chavo; siempre he tenido pareja y he sido estable. A los 15 años tuve mi primer novio, duré con él hasta los 18. Luego, de los 18 a los 22 estuve con Sergio (Mayer, el ex integrante de Garibaldi) y ahora mi pareja es Alejandro (Ibarra), llevamos un año nueve meses?.
-¿Te has sentido agobiada por los hombres en algún momento de tu vida? ?Sí?.
-¿Cómo manejas esa situación? ?Pues mira, te voy a contar una experiencia. Un día, me fui de reventón con mis amigas, siempre íbamos puras viejas. Obviamente los chavos estaban así (todos a su alrededor) y era de no gracias, no gracias hasta que terminabas mentándoles la ma... es raro, pero divertido?.
En ocasiones, ?La Mori? es una persona bastante agradable, en otras contesta por compromiso, pero esta vez ?de muy buena gana- confesó que el medio de la farándula es muy traicionero y donde los artistas tienen sus altas y bajas. ?De repente sientes que nadie te quiere, porque como gente pública hoy tienes una novela muy exitosa y ?por consiguiente- todo el éxito; la prensa está aquí, pero mañana no te llaman para novelas, no hubo otro proyecto y todo mundo se olvida de ti; entonces al tener todo y de repente nada, te desubica. Es un medio donde si no estás con los pies bien puestos sobre la tierra, te rompe ciertos esquemas?.
Súbete a mi Moto fue el último melodrama donde ha participado esta artista de origen uruguayo. Representó a Nelly, la mala de la historia. Durante el transcurso de la telenovela, Antulio Jiménez Pons abandonó la producción de la misma al tener algunas fricciones con la empresa, originando que tanto actores como staff se descontrolaran. La trama cambiaba constantemente y los actores no sabían qué postura tomar.
?Mi personaje se fue a la ruina, se conflictuó; ya no sabía si sonreír maliciosamente porque era la villana o sonreír con una bondadcita chiquita porque así lo marcaba la historia. Es muy feo y complicado trabajar así porque no tienes la psicología del personaje; todo cambiaba. Nosotros como actores sí podíamos opinar con el productor, pero al final de cuentas, el que decide es el escritor?.
Después de su participación en el melodrama, Bárbara Mori se ha enfocado a atender el negocio hotelero que puso en Yelapa, Vallarta junto con su novio Alejandro Ibarra. La inauguración fue en la última semana de noviembre del 2002 y fue hecho con el fin proporcionarle a la gente un lugar para descansar, y donde puedan gozar de las bellezas naturales.