Gómez Palacio, Dgo.- En la empresa marcada con el número 263 del bulevar González de la Vega, permanecen desde el sábado decenas de trabajadores. La razón: temen que su patrón huya con la maquinaria y los deje sin pagarles los salarios.
Antonio Frausto Rodríguez, representante del Frente Obrero Campesino Estudiantil Popular (FOCEP) justificó su presencia en la toma de las instalaciones: “nosotros como organización los estamos apoyando en esta injusticia”.
Según Frausto Rodríguez en la actualidad es recurrente que los patrones evadan la responsabilidad que tienen con sus trabajadores y cometen acciones ilícitas como sacar la maquinaria de las empresas para no liquidar sus adeudos.
“Este problema es constante y por eso el Gobierno Federal a través de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, debe apoyar a los empleados que son víctimas de este tipo de injusticias”.
A decir del representante de la FOCEP, la empresa pertenece Hernán Montes Gil y ha sido heredada de generación en generación. Al parecer tuvo problemas económicos y comenzó a pagarles a medias a los trabajadores.
Los trabajadores le informaron a Frausto Rodríguez que desde hace tres meses carecen de prestaciones que por ley deben otorgarse, pues Hernán Montes Gil los dio de baja en el Instituto Mexicano del Seguro Social y ni siquiera les aviso.
El empresario además cometió otras irregularidades contra los trabajadores como: bajarles el suelo, pagarles en parte su salario o a la mitad, fue entonces cuando los empleados comenzaron a inconformarse y a sospechar de su patrón.
El sábado por la tarde, un grupo de trabajadores se percató que afuera de la empresa había camiones de mudanzas: “en realidad el dueño quería llevarse la maquinaria y los empleados lo impidieron y además resguardaron el lugar porque temían que huyera con todo y sin pagarles un sólo peso”.
Los trabajadores, dice, son los más afectados, pero en ningún momento quisieron saquear la empresa, sólo impidieron que se llevaran la maquinaria. Este lunes acudieron a la Junta de Conciliación y Arbitraje de Gómez Palacio para levantar las actas correspondientes, después restituirán el equipo.
“Los adeudos con cada trabajador están desfasados porque les estaban pagando en abonos. Además de retenerles el salario, se los bajaron lo cual va contra le ley. Los dieron de baja en el IMSS, vamos a denunciar a funcionarios del Seguro Social que permiten la sustitución patronal sin investigar que todo esté en orden”.
Los empleados están desprotegidos. Lo único que les queda es resguardar la maquinaria porque el local donde se ubica la empresa es rentado. Aseguran que acudirán a interponer una denuncia contra Hernán Montes Gil para que no evada sus responsabilidades como patrón.
Según los empleados del lugar, la empresa donde trabajan ha cambiado de nombre en varias ocasiones: primero era conocida como Fabricaciones y Máquinas Héctor Montes, después Tops and Bottoms de México y finalmente Open Tex.
Dueño de maquila abandona su empresa y a los empleados
Gómez Palacio, Dgo.- Como compensación por 14 años de trabajar en la empresa Top Mex, María de la Luz Torres, recibió nada. Ni siquiera un comunicado oficial, simplemente su jefe un día les dejó de pagar a todos y desde el sábado no saben nada de él.
Como supervisora percibía un ingreso semanal de mil pesos, luego el salario fue bajando hasta llegar a los 150 pesos. Desde hacía tiempo que presentía algo malo porque desde enero los sueldos ya no eran los mismos de antes.
María de la Luz dice que su patrón, Hernán Montes Gil, ni siquiera les ha dado la cara, menos les ha ofrecido explicación alguna sobre este problema. Es madre soltera, pero será hasta que encuentre una solución y reciba lo que por ley le pertenece que comenzará a buscar trabajo en otro lado para poder mantener a sus hijos.
Desde diciembre del año pasado, asegura, todos los trabajadores de Top Mex fueron dados de baja en el Instituto Mexicano del Seguro Social. A ninguno le avisaron, se dieron cuenta hasta que alguno tuvo necesidad de ir con el doctor.
En ningún momento pudieron hablar con su patrón. Siempre se mostró prepotente y cuando comenzaron a reclamar los salarios completos, les gritó: “aquí hay cuatro puertas para salir, pueden escoger la que quieran”.
Gabriel García Vázquez también está preocupado. Y es que después de tres años de trabajar en Top Tex se quedó sin empleo y sin liquidación: “todos estamos en la misma situación, yo ganaba 700 pesos por semana y el último sueldo que me pagaron fue de 350 pesos”.
Afortunadamente, dice, su esposa trabaja en otra maquiladora, así sus tres hijos no sufrirán por falta de alimento mientras él consigue otro empleo: “estoy cuidando los niños, pero voy a esperar hasta que este problema se solucione”.