El Gobierno de Durango no ha manejado en forma correcta la zona boscosa de la entidad y, como consecuencia de ello, crece la deforestación y se acaba la riqueza natural con que se cuenta en esta parte del país, arroja una encuesta realizada por la empresa Berumen y Asociados para El Siglo de Durango.
Fueron 400 entrevistas las que se levantaron del 20 de agosto al 16 de septiembre en hogares de la capital y en donde la mayor parte de los encuestados tiene 32 años y por lo menos el 51 por ciento de ellos pertenece a la Población Económicamente Activa.
Consideran los encuestados que a la población en general le falta conciencia ecológica para la conservación de los bosques y las autoridades no han estrechado los lazos de vigilancia que eviten la sobreexplotación de las zonas boscosas y la tala clandestina.
Las causas por las que se origina el problema de la deforestación, según los entrevistados, además de la falta de conciencia ecológica, es la tala inmoderada, la clandestina y la construcción de nuevas viviendas.
Entre los principales problemas que se tienen en los bosques, después de la deforestación, según los encuestados, se encuentra la acumulación de basura, la falta de atención y los incendios, en ese orden.
Desequilibrio
El problema es de todos
Los datos que arroja la encuesta llevada a cabo por Berumen y Asociados para El Siglo de Durango involucran a la ciudadanía y al Gobierno en los problemas de deforestación de los bosques en Durango.