GÓMEZ PALACIO, DGO.- Una respuesta aceptable de los propietarios de vehículos particulares y del servicio público, se ha tenido en el pago de las tenencias y cambio de placas correspondiente a este año en el Centro de Control Vehicular que opera en el Mercado de Abastos de esta ciudad.
El titular de la Recaudación de Rentas en Gómez Palacio, Juan Agustín Vargas Garza, dijo al respecto que de acuerdo con los datos proporcionados por el Centro de Control Vehicular localizado en la Central de Abastos, se había registrado un total de 900 plaqueos en el transcurso de cuatro días.
El padrón vehicular de esta ciudad está integrado por unas 41 mil unidades de uso particular, más otras cuatro mil que pertenecen al servicio público de transporte.
Vargas Garza manifestó que la ciudadanía debe tomar en cuenta los descuentos que se aplican en el pago de sus contribuciones estatales en el transcurso de este mes, que son del 15 por ciento en el pago total; durante el próximo febrero, el descuento será del diez por ciento y en marzo únicamente del cinco por ciento.
El Centro de Control Vehicular prácticamente se observa abarrotado en los últimos días y de acuerdo con lo externado por el titular de la Recaudación de Rentas, el personal tiene la encomienda de atender en promedio a una persona por minuto, aunque debe tomarse en cuenta que si hay gran cantidad de personas formadas la espera puede transformarse en una o más horas.
En este sentido y de acuerdo con un recorrido por el Centro de Control Vehicular, se pudo constatar que hay quienes esperan poco más de una hora desde que inician los trámites con el llenado de la forma correspondiente, la revisión de documentos, el pago en caja y la recepción de las nuevas láminas.
Algunas personas que esperaban su turno para ser atendidas, comentaron la necesidad de que se asigne a uno o varios empleados de la oficina a brindar orientación de quienes acuden ahí y desconocen los pasos a seguir para cumplir con el pago de su tenencia y canje de placas, pues son éstos quienes suelen formarse en la fila equivocada, no presentan la totalidad de los documentos e incluso distraen a las oficinistas que están a cargo de la captura de datos, con la consecuente pérdida de tiempo para los demás.