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Los Ángeles, EU.- Grupos antiinmigrantes de California realizan una ardua campaña para revocar, a través de una consulta, la proposición SB60 que otorga licencias de conducir a indocumentados y que fue aprobada por el gobernador Gray Davis.
Diversas organizaciones han emprendido una costosa campaña para recolectar firmas para llevar a consulta la medida que entraría en vigor el primero de enero próximo y otros han interpuesto demandas para bloquearla.
Para que la medida sea llevada a las urnas en marzo próximo estos grupos deben haber reunido 375 mil firmas antes del siete de diciembre para que sea sometida a consideración de los californianos.
Mike Spence, de la Asamblea Republicana de California (CRA), el grupo que comenzó con la recolección de firmas hace unas semanas, reportó haber reunido ya 200 mil firmas.
Spence anunció que a su campaña se ha unido Rescate California, la organización que fue la que impulsó la recolección de firmas para destituir al gobernador Davis.
También la Pacific Legal Foundation una organización conservadora de Sacramento, presentó el lunes pasado una demanda contra el Departamento de Vehículos de California, entidad encargada de implementar la SB60 a partir de enero próximo.
La PLF deniunció que la medida es anticonstitucional porque se inmiscuye en una jurisdicción que compete al gobierno federal a quien corresponde reglamentar la inmigración por seguridad nacional, y porque promueve el fraude en el sistema electoral.
Las leyes electorales de California indican que cada persona con licencia de conducir recibe un formulario de registro de votantes.
El gobernador Gray Davis, quien el próximo lunes entregará el gobierno a Arnold Schwarzenegg, aprobó en septiembre pasado la proposición SB60 que otorga licencias de conducir a indocumentados.
La SB60 eliminó la ley que requiere a todo conductor presentar un comprobante de ciudadanía para obtener una licencia de conducir, el cual fue aprobado por el estado hace diez años.
La medida sería congelada en caso de que las autoridades certifiquen la autenticidad de las firmas, explicó Spence.
“Después de conseguir las firmas, la medida la revocaremos y la sacaremos como sacamos al gobernador Davis”, vaticinó el activista.
Spence dijo que la organización está dispuesta a invertir medio millón de dólares para financiar la recolección de las firmas, por lo que da por hecho que este campaña sea exitosa.