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México, DF.- El secretario de Agricultura, Javier Usabiaga Arroyo, llamó a dejar atrás todo aquello que desvirtúe la vocación de los campesinos del país, y convocó a éstos a que sepan distinguir la organización productiva de aquella que sólo busca lucrar políticamente.
Aseguró que el campo de México ya no es el mismo de hace 50 ó dos años, prueba de ello es que cada día más productores se deciden a participar en organizaciones, ya no de tipo político como se hacía en el pasado, sino con objetivos y procedimientos claramente enfocados a la modernización y productividad.
Al inaugurar la XX Asamblea General Ordinaria del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), destacó que para elevar la competitividad en el agro se requieren de agrupaciones formales, profesionales, serias y transparentes, con una sólida vocación de servicio de sus agremiados.
Usabiaga dijo que lo que se requieren son agrupaciones que fomenten la unificación de las cadenas productivas, que enlacen a los productores con los transformadores y a éstos con los comercializadores.
Ante dirigentes empresariales y agroempresarios de todo el país, encabezados por el presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Armando Paredes Arroyo, el titular de Agricultura puntualizó que el Acuerdo Nacional por el Campo se está llevando a la práctica e insistió que el sector ya no es el mismo desde hace dos años.
La diferencia, detalló, la hace un manejo transparente y con fines productivos del Procampo; las 19 cadenas productivas de cultivos estratégico; en el programa de ingreso objetivo; en las tarifas preferenciales de energía eléctrica y diesel, entre otras cosas.
Sin embargo, señaló que todavía faltan cosas, como el hacer fluir la capitalización, la organización y la tecnología para, de esa forma, eliminar asimetrías e iniquidades que generan pobreza.
Pidió a los empresarios del agro, que generan el 75 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) agropecuario, ser la vanguardia que jale a la retaguardia, para cumplir con las metas trazadas por el actual gobierno.
A su vez, Paredes Arroyo Loza reconoció que si bien hay avances también existen amenazas que se deben atender con celeridad y eficiencia, como la desarticulación de las cadenas productivas, limitada productividad y una escala de producción demasiado atomizada.
Aunque son muchos los desafíos, añadió, también son muchos los elementos que se tienen para superarlos y para volcarlos en oportunidades de crecimiento y desarrollo del sector rural, meta inaplazable, pero reiteradamente aludida en México desde hace muchos años.