05 junio 2003
DOHA, (AP).- El presidente estadounidense George W. Bush visitó a la tropa que invadió Iraq, y prometió que "divulgaremos la verdad" sobre las supuestas armas de destrucción masiva iraquíes, en medio de denuncias acerca de que exageró la amenaza de esas armas para justificar la guerra.
El mandatario sobrevoló Bagdad a bordo del avión presidencial en su vuelo a Washington. "Nos hemos asegurado de que Iraq no será arsenal de grupos terroristas", dijo Bush en un discurso ante una multitud de soldados en Campamento As Sayliya, Katar, que sirvió de cuartel general para la guerra iraquí.
Bush mencionó el reciente descubrimiento en el norte de Iraq de dos camiones que, según las agencias de inteligencia, fueron instalaciones móviles de producción de armas biológicas.
En realidad no se ha hallado ningún sistema completo de producción de armas en Iraq. Los camiones no portaban residuos de agentes biológicos ni mostraban indicios de haber sido usados para producir armas biológicas. "Estamos buscando. Revelaremos la verdad", dijo Bush sin prometer específicamente que se encontrarán armas. "Pero algo es seguro: ninguna red terrorista obtendrá armas de destrucción masiva del régimen iraquí porque el régimen iraquí ya no existe".
La visita de Bush ocurre en medio de cuestionamientos sobre su justificación primaria para el conflicto en Iraq: que Saddam tenía armas de destrucción masiva y las iba a usar en cualquier momento.
Las fuerzas estadounidenses y británicas no han hallado evidencia tangible de que Saddam tenía gran cantidad de armas químicas y biológicas listas para usarlas. En una entrevista reciente concedida a la televisión polaca, Bush se refirió a los camiones hallados aseverando que "hemos encontrado las armas de destrucción masiva".
El presidente, en su arenga ante los soldados, enfatizó las libertades de las que ahora gozan los iraquíes y no tanto la cuestión de las armas. Mencionó en repetidas ocasiones la palabra "libertad".
Los soldados estadounidenses tratan de terminar con una oleada delictiva de la que Bush culpa a Saddam, quien, según dijo, sacó de las cárceles a "criminales comunes" justo antes de la guerra y dejó a su pueblo hambriento y desesperado.
"El mundo está viendo ahora lo que muchos de ustedes han visto", dijo Bush a unos 1.000 entusiastas soldados que lo aclamaban. "Está viendo las cámaras de tortura. Gracias a ustedes, se ha erradicado una enorme maldad. Gracias a ustedes, la dignidad de una gran nación ha sido restaurada".
Bush culpó a Saddam de descuidar la infraestructura de su país sin mencionar el daño producido por la guerra.