Dallas, (Notimex).- La Universidad Metodista del Sur (SMU), una de las más prestigiadas en Texas, canceló una venta de pasteles organizada por un grupo de estudiantes, luego de que se vendían a varios precios dependiendo de la raza y sexo del comprador.
En la venta, que permaneció 45 minutos antes de ser cancelada, un letrero indicaba que los hombres de origen anglosajón debían de pagar un dólar por una galleta, 75 centavos las mujeres anglosajonas, 50 centavos los hispanos y 25 centavos los afroamericanos.
La venta fue organizada el pasado miércoles por el grupo "Young Conservatives" (Jóvenes Conservadores) de Texas que se oponen a los programas de acción afirmativa que permiten asignar cuotas para garantizar el ingreso de estudiantes de minorías a las universidades.
Integrantes del grupo explicaron que organizaron la venta de pasteles para tratar hacer una declaración política en protesta por el uso de la raza como factor en las inscripciones a las universidades.
Desde febrero pasado estudiantes conservadores han realizado protestas similares en diversos campus a lo largo de Estados Unidos.
Organizadores de la protesta explicaron que sólo intentaban ejercitar su libertad de expresión tratando de llamar la atención sobre la acción afirmativa.
Sin embargo, un estudiante afroamericano que se sintió ofendido por el evento interpuso una queja por discriminación ante las autoridades de la Unicersidad que de inmediato procedieron a cancelar la venta.
"Este no era un asunto de libertad de expresión. Se trataba en verdad de un asunto donde teníamos la creación de ambiente hostil potencialmente volátil" explicó este Tim Moore, director del Centro Estudiantil de la SMU al diario The Dallas Morning News.
Añadió que durante la venta, los estudiantes comenzaron a juntarse alrededor de una mesa en las afueras del Centro Estudiantil y varios comenzaron a involucrarse en una competencia de gritos" unos contra otros.
David Rushing, estudiante en el segundo año de la Escuela de Leyes de la SMU y líder del grupo que organizó el evento, explicó que el acto se efectuó para dar a los estudiantes el sentimiento de inequidad.
Matt Houston, estudiante de nuevo ingreso dijo que el letrero en el que el grupo enlisto los precios en base a la raza y sexo de los compradores, "no fue una herramienta de aprendizaje. Fue ofensivo".