TORREÓN, COAH.- Al igual que las autoridades municipales, vecinos de la colonia Torreón Jardín están de acuerdo en que la avenida Central deje de ser Paseo Público y se adopten las acciones adecuadas para terminar con la llamada “Fiebre de ‘Guaruras’ ”, problema que en cualquier momento puede arrojar saldos lamentables.
El Siglo de Torreón dialogó con habitantes del sector, quienes reconocieron que no son autoridad para determinar que se apliquen sanciones; eso compete a la corporación policíaca de los distintos niveles de gobierno según sea la falta o delito cometido por los llamados “juniors” y sus cuidanderos.
Como se sabe, la colonia Torreón Jardín, que se exhibía ante la sociedad como ejemplar por su aparente tranquilidad, padece serios problemas de inseguridad, sobre todo de jóvenes con intenciones sanas de divertirse o pasear por las arterias del fraccionamiento, debido a la presencia de “niños bien”, que se hacen acompañar con “guaruras”, los cuales portan sendas armas de fuego, desconociéndose si cumplen o no con el marco legal.
Padres de familia del sector informaron a El Siglo de Torreón que el problema debe ser atendido cuanto antes, pues cada día que pasa, es un riesgo que se corre, ya que los “juniors” siguen circulando por la avenida Central, con sus acompañantes y haciendo gala de influyentismo y prepotencia.
Reconocieron los habitantes entrevistados que en todos los casos, no es responsabilidad de los jóvenes, sino de los padres que piensan que con contratarles un “guarura” a sus hijos, cumplen con su papel de papá, sin tomar en cuenta el daño que les ocasionan.
Aseguraron que muchos jovencitos de la colonia Torreón Jardín, han sido agredidos por estas personas, algunos ex agentes de corporaciones policíacas y las ofensas y daños ocasionados quedan impunes ante la intervención irresponsable del padre de familia. No se sabe quiénes son, si tienen antecedentes o no y si se mantiene un control de aquéllos que portan armas de fuego.
Los vecinos sostuvieron que es urgente una reunión con autoridades municipales, pues en cualquier momento puede ocurrir una balacera con consecuencias desagradables. Incluso, algunas personas aseguraron que algunos “juniors”, son de otras partes del sector, hasta de Lerdo y Gómez Palacio y acuden a la colonia asumiendo una postura retadora con firmes intenciones de alterar el orden y la tranquilidad y no es justo.
“Guaruras” hasta de regalo
Un vecino recordó un incidente ocurrido hace tres meses, cuando tres jovencitos a bordo de un vehículo chocaron con un árbol que está afuera de su casa y al salir, atemorizados, le pidieron que los dejara entrar a su hogar, pues eran seguidos por unos “guaruras” que traían pistolas.
Sostiene el habitante de la colonia que al verlo, los “guaruras” asumieron otra actitud y afortuna-damente se retiraron, pero el riesgo que corrieron los muchachos sí es para tomarse en cuenta y decidir acciones inmediatas, dada la portación de armas de fuego por parte de estos sujetos.
En navidad, añadió, se conocieron varios casos de jovencitos que pidieron de regalo “guaruras”, como pedir un teléfono celular en un sector de otra clase social, sólo con el fin de sentirse más importantes y “apantallar” a los amigos, explicó.
Al igual que otras personas, este vecino consideró que los padres son los responsables del problema, al no tener el control familiar de poner orden con sus hijos, sin tomar en cuenta que ellos también pueden ser parte de los resultados lamentables que pueden surgir en un enfrentamiento.
El problema se padece en toda la colonia, pues el hecho citado ocurrió a cinco cuadras de la avenida Central y las persecuciones y agresiones de “guaruras” a otros jovencitos, son frecuentes y por ello es necesario atender de inmediato el problema, consideró.