TORREÓN, COAH.- Con engaños, un sujeto llevó a su domicilio a una jovencita y ya en el interior abusó de ella y cuando otro individuo intentó hacer lo mismo, logró escapar para solicitar el auxilio de la policía que logró detener a ambos libidinosos.
Los inculpados responden a los nombres de José de Jesús Rodríguez Rodríguez, alias “El Capulo”, de 34 años de edad, vecino de calla San Salvador No. 1226 del fraccionamiento Latinoamericano y Nicolás Reyes Urbina, “Don Nico”, de 44 años, con casa en calle Brasilia No. 1198 del mismo sector habitacional.
Según se desprende del parte informativo de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), la jovencita, de 17 años de edad, también con domicilio en ese fraccionamiento y que por razones obvias se omite su identidad, con engaños José de Jesús logró llevarla a su casa, supuestamente “para platicar”.
Ya en el interior de la vivienda en donde estaba Nicolás, el sujeto intentó obligarla a que ingiriera cerveza a lo que la muchacha se negó rotundamente, pero de nueva cuenta consiguió sorprenderla cuando la invitó a su recámara en donde “le enseñaría algo”.
Cuando estaban en la habitación, fue que José de Jesús se abalanzó sobre ella y comenzó a desvestirla con lujo de violencia, para enseguida arrojarla sobre la cama en donde llevo a cabo el ultraje, pese a los esfuerzos de la joven por resistirse.
Una vez perpetrado su incalificable delito, el presunto violador se vistió y salió del cuarto al que entró casi de inmediato “Don Nico”, quien anunció a la muchacha que seguía él y no se iba a ir hasta que se sometiera a sus pretensiones.
Un descuido de este segundo individuo fue aprovechado por la asustada joven que de un puntapié pudo abrir la puerta que da a la calle y que había estado cerrada con llave, para salir corriendo y pedir auxilio a las personas que ahí se encontraban.
Patrulleros de la unidad 35210 de la DSPM acudieron hasta el lugar de los hechos donde la afectada les manifestó lo ocurrido y pronto se abocaron a la ubicación y posterior detención de los presuntos violadores a los que se remitió a la ergástula municipal a disposición del Ministerio Público.
Las autoridades competentes tomaron cartas en el asunto y ya ordenaron las pruebas periciales necesarias para acreditar el ilícito y de esta manera decidir la situación de los inculpados.