TOKIO(AP) .- El líder cubano Fidel Castro visitó el monumento a las víctimas de la bomba atómica lanzada por Estados Unidos en el occidente de Japón durante la Segunda Guerra Mundial, donde reflexionó sobre la crisis nuclear de la que su país escapó hace décadas, sin referirse a la controversia actual sobre una posible guerra en Iraq.
El líder de 76 años colocó una ofrenda de flores blancas y rosas en un monumento que honra a 226.000 personas que murieron cuando la bomba fue lanzada sobre Hiroshima el de agosto de 1945.
En el registro de visitantes, Castro escribió que tal acto de barbarie nunca debe volver a repetirse.
Castro, que está en Japón como parte de una gira asiática de 11 días, había pronunciado un discurso encendido en Malasia criticando a Estados Unidos por tratar de ejercer coerción en el mundo para que apoye un ataque innecesario contra Irak.
Pero el lunes, Casto rehusó entrar en un debate político y señaló que aunque hay muchas cosas que cree en su corazón, ese no era el sitio apropiado para hablar de política, según un comunicado.
Dijo, en cambio, que su visita al museo, que documenta en forma vívida la destrucción causada por la bomba, le hizo reflexionar en el desastre evitado con mucha suerte hace unos años, durante la llamada Crisis de Misiles Cubanos, un momento que según los historiadores es lo más cerca que el mundo ha estado de una guerra nuclear, cuando la Unión Soviética colocó en la isla misiles capaces de alcanzar el territorio estadounidense.
Castro tenía programado volver a Cuba el lunes por la noche pero su piloto decidió retrasar el vuelo debido al mal clima en la región. No hay informes sobre sus actividades del martes.
Esta es la segunda visita de Castro a Japón, y la primera a Hiroshima.