01 noviembre 2003
CIUDAD DEL VATICANO, (AP).- Juan Pablo II celebró el sábado el Día de Todos los Santos recordando a aquellos que ya están en el cielo y a los difuntos que han sido olvidados.
El pontífice habló ante cientos de peregrinos reunidos en la Plaza de San Pedro; parecía sentirse bien y hablaba con voz fuerte.
El Papa, de 83 años, parece recuperado tras las intensas actividades del mes pasado durante la celebración del 25° aniversario de su pontificado.
"Hoy celebramos la solemnidad de Todos los Santos. Esto nos exhorta a a recordar a aquellos que han llegado ya a la tierra bendita, y nos indica el camino que nos llevará a ese destino", dijo.
Más tarde, habló sobre la tradición de honrar a los muertos en esta época del año. "Yo también voy en peregrinaje espiritual a los cementerios de varias partes del mundo, donde descansan los restos de aquellos que nos precedieron en la fe", agregó. "En particular elevo mi plegaria de intercesión por aquellos en quienes nadie piensa ya, como las víctimas de la violencia".