26 julio 2003
Londres, (EFE).- La primera niña probeta del mundo, la británica Louise Brown, aseguró hoy sentirse "normal" y nada "especial" durante la fiesta con la que se celebró su 25 cumpleaños en una clínica de Cambridge (sur de Inglaterra).
El nacimiento de Brown, el 25 de julio de 1978 gracias al primer tratamiento de fertilización "in vitro", revolucionó el mundo de la medicina y desde entonces más de un millón de niños han sido concebidos con ese mismo método.
Una pequeña representación de esos niños -aproximadamente mil- acudieron hoy a esa fiesta, en la clínica Bourn Hall, para celebrar con Louise Brown el cuarto de siglo que ha pasado desde que los tubos de ensayo ofrecieron una esperanza a las parejas que no podían tener hijos por medios naturales.
"Es estupendo estar aquí y ver a todos estos niños 'in vitro'", les dijo a los asistentes la primera bebé probeta, que ahora es cartera en Bristol (suroeste de Inglaterra).
"No me siento especial, soy una persona normal", aseguró.
Louise Brown fue engendrada en 1977 en el exterior de la matriz de su madre y dentro de un tubo de ensayo.
Actualmente, la fertilización in vitro es un tratamiento rutinario en los hospitales que garantiza el 75 por ciento de éxito en los pacientes que lo soliciten.
Durante la celebración de hoy, uno de los pioneros del tratamiento, el profesor Bob Edwards, aseguró que los descubrimientos científicos que se han llevado a cabo en los últimos 25 años representan casi medio siglo de avances.
"El mundo de la ciencia está avanzando muy deprisa; es absolutamente increíble", comentó Edwards.
En su opinión, el nacimiento de Louise "significó mucho" porque, "por primera vez, la ciencia y la medicina entraron en una concepción humana y, además, lo hicieron de la forma más decisiva". EFE
Antes de que naciera Louise Brown, en la localidad de Oldham, en Lancashire (norte de Inglaterra), las esperanzas para las parejas que no podían tener hijos eran muy pocas.
Actualmente, la fertilización in vitro es un tratamiento rutinario en los hospitales que garantiza el 75 por ciento de éxito en los pacientes que lo soliciten.
Allan Templeton, profesor honorífico del Colegio Real de Tocólogos y Ginecólogos de Londres, dijo hoy que "en estos momentos los médicos pueden cambiar realmente la vida de las personas".
Louise, que trabaja como cartera en Bristol (suroeste de Inglaterra), comentó, durante una entrevista concedida a los medios cuando cumplió 20 años, que se sentía "especial" por la forma en que fue concebida.
"Cuando tenía diez años solía pensar en ello, pero ahora, después de que tantos niños hayan nacido de la misma forma, ya no", afirmó entonces.