EFE
ROMA, ITALIA.- Manuel Filiberto de Saboya, hijo del heredero de la última familia reinante en Italia, contrajo matrimonio en Roma con la actriz francesa Clotilde Courau.
El nieto del último rey de Italia, Umberto II y la artista francesa se prometieron amor eterno en una vistosa ceremonia oficiada por el cardenal Pío Laghi en el fastuoso marco de la basílica de Santa María de los Ángeles, diseñada en el Siglo XVI por Miguel Ángel.
La elección de este templo se debe a que fue el mismo lugar en que contrajo matrimonio su bisabuelo, el rey Víctor Manuel III de Saboya con Elena de Montenegro en 1896.
Entre los más de 1,300 invitados se encontraba el príncipe Alberto de Mónaco, que actuó como testigo del novio, además de otras figuras conocidas como el modisto Valentino, el cantante Johnny Hallyday y gran parte de la nobleza italiana.
Sin embargo, en la boda no estuvo presente ningún alto representante del Gobierno, a pesar de que habían sido invitados, ni tampoco acudieron representantes de las casas reales europeas, a excepción del heredero del trono monegasco.
Los organizadores han justificado estas ausencias por el hecho de que las invitaciones fueron cursadas a principios de este mes, dejando por tanto poco tiempo para permitir la asistencia.
La “boda del año’’ en Italia, que ha despertado gran expectación y se ha convertido en un acontecimiento mediático, contó con la presencia de más de un centenar de periodistas.
La decisión de casarse en Roma ha supuesto un gesto de gratitud hacia el gobierno italiano por haber puesto fin a su exilio y es una forma particular de sellar un “reencuentro’’ con sus compatriotas, según ha asegurado el propio Manuel Filiberto, de 32 años.
El “príncipe Saboya’’ pisó por primera vez suelo italiano junto con su padre, Víctor Manuel de Saboya, el pasado diciembre, como simples ciudadanos después de que el Parlamento derogara una disposición constitucional que prohibió, en 1948, la entrada en el país a los herederos varones de la casa real por su colaboración con el régimen fascista de Benito Mussolini.
Nacido en 1972 en el exilio en Ginebra, Suiza, donde reside la familia, Manuel Filiberto trabaja como asesor para un banco helvético y había adquirido cierta popularidad en Italia al participar años atrás como comentarista deportivo en televisión.
Por su parte Clotilde Coreau, de 34 años, y con más de veinte películas en su haber, ha asegurado que no piensa abandonar su carrera de actriz tras su matrimonio, al señalar que su esposo “no desea para nada que yo me quede en casa sin trabajar’’.
La novia portaba un traje estilo imperio diseñado por Valentino y que no ocultaba su avanzado estado de gestación.
La pareja, que se conoció hace tres años en Montecarlo en el curso de una competición de florín, espera un hijo que nacerá el próximo diciembre, aseguran estar “completamente enamorados’’ y estudian si trasladar su domicilio definitivo a Italia.
La boda ha provocado las críticas de algunos círculos monárquicos italianos, en especial después de la publicación en algunos medios de fotografías en las que Courau aparece desnuda y que proceden de algunos de sus filmes.
Tras la ceremonia y la lectura de un mensaje de felicitación del Papa tuvo lugar una recepción en un céntrico hotel romano.
La pareja ha renunciado al tradicional viaje de novios debido al avanzado estado de gestación de la actriz, por lo que tan sólo realizarán una breve visita a Florencia.