En acto luctuoso del 7º aniversario del fallecimiento de Antonio Ramírez Martínez, donde se ratificó la propuesta para que sus restos sean llevados a la Rotonda de los Hombres y Mujeres Ilustres de Durango, la CTM impuso la Medalla al Mérito sindicalista a 4 cetemistas que se han distinguido por el trabajo realizado a favor de los trabajadores.
“Antonio Ramírez como fue, merece ser el protagonista de una muy buena biografía que sirva de ejemplo. Merece acompañar a los hombres ilustres de Durango que en donde están iluminan el camino de su tierra, merece estar entre los personajes que construyeron nuestra historia duranguense en el siglo XX”, expresó Ricardo Pacheco Rodríguez, orador de la ceremonia luctuosa que se realizó frente a la tumba que guarda los restos del dirigente cetemista, con motivo del 7º aniversario de su muerte, y que registró la presencia de José Miguel Castro Carrillo, con la representación del gobernador Ángel Sergio Guerrero Mier, del alcalde José Aispuro Torres, así como diputados, senadores y personajes de la clase política local.
Ante los cetemistas que lo acompañaron en vida en su diaria lucha al frente de la central obrera, Ricardo Pacheco recordó que Antonio Ramírez desarrolló una conducta que era aleccionadora: “Decía que había que aprender del error para ser mejor; defender la razón en beneficio de una causa; combatir y saber que perder fortalece el espíritu y que ganar significa dignificar los valores por los que se lucha”.
Los sindicalistas que recibieron la medalla en reconocimiento su labor a favor de la clase trabajadora fueron: María Esther Alvarado Burciaga, Tomás Rocha Rocha, Tobías Carrillo Rivas y José Luis Ríos Rodríguez. La entrega de estas preseas a mitad del acto luctuoso fue realizada por José Ramírez Gamero, actual dirigente de la CTM, José Miguel Castro Carrillo y José Aispuro Torres.
La actuación de miembros del Taller Literario “Korián”, dirigidos por la profesora Elia María Morelos, y la Banda de Guerra del Sindicato de Tahoneros dio la nota musical a la ceremonia de póstumo homenaje a Ramírez Martínez, quien según Ricardo Pacheco ya tiene ganado un lugar en la historia de Durango “fundamentalmente por los logros conseguidos para los trabajadores y sus familias: salario mejor, despensa, seguridad social, vivienda, prestaciones que tienen miles de trabajadores con nombre y rostro, con mujer e hijos que no son fantasmas de la teoría”.
“Antonio Ramírez cumplió su tarea principal, acompañada de la acción política, esa que no divide ni desestima y enfrenta, sino de la que une, de la que es solidaria y leal, de la que produce frutos, no la que los destruye”, enfatizó Pacheco a nombre del cetemismo duranguense.