15 mayo 2003
PEKIN, (Reuters) - China, acosada por la expansión de una epidemia de neumonía atípica a sus zonas rurales, amenazó con ejecutar o condenar a cadena perpetua a cualquier persona que propague intencionalmente el letal virus.
La noticia se produjo cuando Gran Bretaña reportó su primer caso confirmado de neumonía atípica, o SARS, en momentos en que las autoridades de Taiwán pusieron en cuarentena a cientos de personas en dos grandes hospitales, por temor a una epidemia de la enfermedad en la isla de gobierno autónomo.
China, que ha reportado 271 muertes y aproximadamente dos tercios de los 7.700 casos de SARS registrados en el mundo, emitió una severa interpretación de sus leyes sobre enfermedades contagiosas, tras versiones de que algunas personas estaban violando las órdenes de aislamiento o negándose a admitir los síntomas.
"Propagar intencionalmente patógenos de enfermedades contagiosas repentinas, poner en peligro la seguridad pública o causar daños personales graves, la muerte o cuantiosas pérdidas para la propiedad pública o privada, será castigado con sentencias de entre 10 años y cadena perpetua o la pena de muerte", dijo la agencia oficial de noticias Xinhua.
Grupos de derechos humanos criticaron la severidad del castigo, fijado por la Corte Suprema y la fiscalía.
"La medida es demasiado extrema y el castigo demasiado severo", dijo por teléfono desde Hong Kong el activista de los derechos humanos Frank Lu.
El castigo "viola el acuerdo internacional de derechos humanos y no fue aprobado por el Congreso Nacional del Pueblo (parlamento chino)", agregó Lu.
Sin embargo, la Organización Mundial de la salud (OMS), que ha alertado consistentemente del peligro de diseminación del SARS en la zona rural de China, dijo que las personas deben actuar responsablemente y solicitar pruebas de detección sistemática de sangre u donantes de órganos por una posible infección de SARS aunque hasta ahora no se sabe de casos por esta vía de transmisión.
"Pienso que suena muy duro. Pero creo que las personas tienen una cierta responsabilidad y es muy importante que entiendan lo que es esa responsabilidad", dijo a Reuters el representante de la OMS en China, Henk Bekedam.
Funcionarios chinos reconocen que los controles de salud podrían ser insuficientes para contener la epidemia.
Todavía "persisten el riesgo potencial y los canales para que se extienda la epidemia de SARS a la zona rural", dijo el viceministro de Agricultura, Liu Jian. "Necesitamos otorgar la mayor atención y (actuar con) precaución", agregó.
La Agencia de Protección de la Salud de Gran Bretaña dijo el jueves que un paciente, el primer caso confirmado de SARS, se había recuperado y no había contagiado la infección. No se requirió mayor acción de salud pública, agregó. Sin embargo, hay otros tres casos posibles.
Shanghai reportó su segunda muerte por el letal virus que también ha causado desastres en la economía. Un organismo de turismo mundial comentó que el virus le costará a China cerca de tres millones de empleos en la industria este año.
TEMOR EN TAIWAN
Taiwán, con sólo unos cuantos casos de SARS hasta fines de abril, ahora tiene 264 casos confirmados y 34 muertes, con lo que se ha convertido en uno de los países más afectados en el mundo, después de China territorial y Hong Kong, que ha visto 234 defunciones.
El tráfico ha desaparecido de las usualmente agitadas calles de Taipei, las tiendas por departamentos están en su mayoría vacías y los hoteles y restaurantes se han quedado prácticamente sin clientes.
Sin embargo, el golpe más fuerte fue el aislamiento el miércoles de unos 400 pacientes y trabajadores de la salud en dos importantes hospitales, uno en Taipei y otro en la ciudad sureña de Kaohsiung, y la noticia de que otras 100 personas serían también colocadas en cuarentena en un tercer hospital.
El gobierno ordenó a todos los pasajeros del servicio de trenes subterráneos usar mascarillas y canceló los permisos para los militares. La unidad de guerra química del ejército se ha convertido en algo que se ve comúnmente, ya que desinfecta la capital distrito por distrito.
Sin embargo, hay buenas noticias para Canadá y Singapur.
En una actualización regular sobre la diseminación de la enfermedad, la OMS dijo que había sacado a Canadá de su lista de áreas de diseminación.
Canadá, con 24 muertes por SARS, es el único país fuera de Asia donde han muerto personas de SARS, todas en el área circundante a la capital financiera, Toronto.
La OMS recibió con beneplácito la acción enérgica en Singapur de aislar a enfermeras enfermas y pacientes en el mayor hospital de enfermos mentales de la ciudad estado, --los pacientes tenían fiebre elevada, que es un síntoma clave del SARS--, pero explicó que otra enfermedad era la responsable.
Singapur, con algunas de las medidas contra el SARS más estrictas del mundo, había considerado tener la enfermedad bajo control hasta que se anunciaron posibles casos el miércoles.