AGENCIAS
Lausana, Suiza.- Algunos choques se produjeron ayer por la tarde en Lausana, Suiza, al otro lado de Evian, sobre el río Ginebra, donde se hospedarán muchas delegaciones del G8; entre la policía y unos cien manifestantes violentos que lograron infiltrarse y ubicarse a la cabeza de la primera manifestación contra la cumbre del G8 que comenzará el domingo en Evian, Francia.
Durante algunos minutos los manifestantes encapuchados arrojaron diversos proyectiles a la policía, que reaccionó lanzando granadas lacrimógenas pero sin arremeter.
Un grupo de enmascarados había logrado infiltrarse momentos antes entre los cinco mil manifestantes, pese a la resistencia de los encargados de supervisar el orden de la marcha, hasta ese momento pacífica.
Por otra parte, otros grupos anti G8 realizaron una marcha pacífica para disipar el temor de que el pueblo francés de Annemase, lo más cerca que podrán llegar los manifestantes al escenario de la cumbre del grupo, pueda convertirse en un campo de batalla.
Miles de manifestantes marcharon frente a tiendas y bares de la pequeña localidad en anticipación a la protesta principal del domingo contra la cumbre, que reunirá del primero al tres de junio al presidente estadounidense, George W. Bush, y otros líderes mundiales en Evian, a unos 40 kilómetros de distancia.
Con golpes de tambores, silbatos y músicos y ondeando banderas que representaban un arcoiris de paz, los manifestantes distribuyeron una carta abierta a los residentes de la población alpina para asegurarles que no tienen nada que temer.
“El objetivo de esta marcha festiva es demostrar que no somos provocadores de disturbios, estamos aquí para defender los derechos, que también son los suyos (de los residentes de Annemasse)”, dijo Sophie, una psicóloga de la región que participó en la marcha.
Temiendo que se repitan las violentas protestas que se han registrado en anteriores cumbres, numerosos pequeños empresarios de Annemasse gastaron cada uno alrededor de 1,200 euros (1,400 dólares) para proteger las fachadas de sus negocios.
Un círculo de hierro y cemento ha transformado la estación local de policía en una fortaleza, protegida con bloques de concreto, barreras de metal, rollos de alambre y cercas de metal de dos metros de alto.
“No somos kamikazes (suicidas)”, dijo un manifestante del grupo alemán “No Nación, No Fronteras” cuando se le preguntó si las marchas de protestas buscarían derribar las barreras de la policía para tratar de pasar a Evian.
Francia escogió al pueblo alpino de Evian precisamente porque tiene una sola carretera de acceso y es fácil de defender de los manifestantes.
Los líderes de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Alemania, Italia, Canadá, Japón y Rusia tienen previsto sostener encuentros con jefes de estado de varios países en desarrollo, entre ellos China.
Una residente de Annemasse, Catherine Simula, cuyo bar Le Globe en Annemasse está ubicado en la ruta de la marcha, reclamó que las medidas de seguridad estaban sofocando el pueblo.
Inicialmente, los organizadores esperaban contar con varios cientos de miles de personas en la protesta principal. Pero los organizadores de la “contra cumbre” que se realiza en Annemasse y las autoridades franceses, dijeron que esperaban sólo entre 50,000 a 70,000 personas.