Espectáculos Rob Reiner Entrevistas FÁTIMA BOSCH Conciertos SERIES

Chris Rock toma a presidencia

Agencias

MÉXICO, DF.- Sorprendido todavía por la positiva respuesta que el público le dio a su filme Head of State durante su debut el fin de semana pasado, el comediante Chris Rock asegura que la fama nunca fue el principal objetivo de su carrera.

“Yo siempre tuve el sueño de ser comediante y creo que a pesar de todo lo he conseguido. Los 14 millones de dólares que obtuvo mi película en sólo tres días demuestran que a la gente le gusta mi trabajo. Algo que me hace sentir muy bien y feliz de la vida”.

Nacido en el suburbio de Bedstuy, Brooklyn, de la ciudad de Nueva York, Chris Rock forma parte de la nueva generación de humoristas afroamericanos que están triunfando en Hollywood. Entre ellos se encuentran Chris Tucker, Eddie Griffin, Bernie Mac, Orlando Jones, Steve Harvey y Dave Chapell.

“Con Head of State pude cumplir otra de las aspiraciones que tenía, que era la de dirigir mis propias películas. Aunque no fue muy fácil convencer a los productores de que podía hacerlo, finalmente pude venderles la idea de que sería un gran error no permitirme ocupar la silla de director en un filme como éste”.

Escrito por Ali Leroi y el propio Rock, el guión de Head of State tiene como personaje central a un tímido burócrata al que un inesperado golpe de suerte lo lleva a convertirse, de un momento a otro, en candidato a la presidencia de Estados Unidos.

“Cuando empezamos a trabajar en el argumento de Head of State no sabíamos qué dirección podría llegar a tomar nuestra historia”, explica Rock mientras una fuerte carga de adrenalina le va recorriendo las venas.

“Poco a poco Ali y yo fuimos llegando a la conclusión de que no deberíamos tratar de escribir un filme realista. Fue por ese motivo que le dimos a todos los personajes, entre los que está el mío, una dimensión cercana a la que tienen los cuentos de fantasía y las fábulas audiovisuales, porque sólo en el mundo de la imaginación un individuo como yo pude aspirar a la presidencia de este país, un lugar que siempre ha estado reservado para los chicos blancos y sus millonarias y muy felices familias”.

Tiene todo bajo control

Dueño de una energía física que por momentos da la impresión de ser inagotable, que le hace ir de un lugar a otro, Rock asegura que todo el tiempo ha sido un control freak.

“No me gusta dejar nada en manos de otras personas” señala Rock con su típica sonrisa. Luego agrega con el ceño fruncido: “Soy una especie de tirano cuando estoy trabajando. Escucho las opiniones de quienes colaboran conmigo, pero quien toma las decisiones soy solamente yo”.

“A lo mejor es por eso que siempre me he sentido muy identificado con los directores de cine. Durante una de las etapas de producción de Head of State sentí que estaba llevando demasiado lejos la pasión que tengo sobre el control. Así que llame a algunos de mis colaboradores y le dije que a partir de ese momento todo el trabajo sería distribuido democráticamente entre todos”.

“No tardé mucho tiempo en darme cuenta que había cometido un grave error. La calidad y el ritmo de la producción empezaron a bajar peligrosamente. Cuando volví a tomar el control como director y actor de Head of State todo volvió a recuperar el nivel que tenía antes”.

Producida por Dreamworks, Head of State es la segunda cinta que dicho estudio realiza para tratar de conquistar el mercado afroamericano. La primera fue Bikerboys, película que, aunque tuvo un mediocre desempeño en las taquillas de los cines, al final consiguió demostrar qué tan grande y redituable puede llegar a ser ese segmento de la sociedad estadounidense.

“Ellos recibieron con los brazos abiertos la oportunidad que les dimos con nuestro filme. Antes de presentar el proyecto de Head of State a Dreamworks estuvimos tratando de colocarlo en alguno de los grandes estudios de Hollywood, pero a casi nadie le interesó gastar algunos de los millones de dólares que tienen en una cinta como ésta”.

“Al principio se mostraron un poco receptivos hacia nuestro filme, después me presentaron una lista de cambios y modificaciones que deseaban hacerle al guión. Entonces yo empecé a ponerme un poco paranoico. Así que cuando les dije que no estaba dispuesto a satisfacer ninguna de sus peticiones, simplemente no volvieron a llamarme”.

“Afortunadamente, Walter Parks, de Dreamworks, tuvo la visión y la audacia de creer que además de actuar en ella yo podría dirigir la primera película de mi carrera. Ahora estoy muy contento por no haber defraudado la confianza que puso en Head of State”.

Un sueño lejano

Con respecto a la posibilidad de que un ciudadano afroamericano pueda llegar a ser algún día presidente de la nación más poderosa del mundo, tal y como lo propone Head of State, Chris Rock sabe que se trata de una hipótesis difícil de comprobar.

“No lo sé, a lo mejor dentro de 20, 30 ó 40 años podrían darse las condiciones sociales y políticas para que algo así llegue a ocurrir. Por el momento esto sólo ocurre en el cine”.

“Yo pienso que soñar no cuesta nada. Así que seguiré pensando que, con un poco de suerte, a lo mejor hasta yo tengo la oportunidad de ser el comandante en jefe de Estados Unidos. Lo único que yo no haría jamás sería declararle la guerra a ningún otro país en la Tierra. Como lo hizo recientemente el señor George W. Bush”.

Se estrena como director y “presidente”

El irreverente Chris Rock vuelve a la pantalla grande como Presidente de los Estados Unidos. Rock es el protagonista de la película en la que también debuta como director.

-Mays Gilliam es un Consejal de un vecindario de Washington, D.C. que va ser eliminado de su posición. Pero tras la inoportuna muerte del candidato por el partido, Giliam emerge repentinamente del anonimato y es lanzado a la prominencia como candidato nominado por su partido- para Presidente de los Estados Unidos.

-Bernie Mac hace el papel de Mitchi, su hermano mayor, quien ahora es su compañero de campaña. Ahora, tienen todo para ser un equipo ganador: Un manager de campaña y una consejera.

-Sin embargo, Gilliam no sabe cómo quitarse de encima a su ex-novia, que ve como ventaja el estar con él y convertirse en la primera dama del país. En cambio, Lisa, es una muchacha que trabaja en una estación de gasolina, y está al lado de Mays sin importar el resultado final de la elección. Ahora, ella es su nuevo amor.

-El senador Bill Arnot, es el líder del partido político al que pertenece Mays. Él mismo se encargó de escogerlo como candidato para la presidencia, sin embargo, se interesa más por su futuro que el de Gilliam.

-Durante esta carrera política, Mays se verá en problemas para llegar a la presidencia, donde se encontrará con aventuras y situaciones jocosas. ¿Podrá Mays convertirse en el primer presidente Afro-americano de los Estados Unidos?

FUENTE: Agencias

Leer más de Espectáculos

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Espectáculos

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 26692

elsiglo.mx