Título Original: Charlie´s Angels : Full Throttle
Elenco: Cameron Díaz, Drew Barrymore, Lucy Liu, Bernie Mac, Demi Moore, Crispin Glover, Luke Wilson, Matt Le Blanc, Justin Theroux
Director: McG
En dos Palabras: Ridícula e Irreal
Calificación: **1/2
Mínimo * Máximo*****
Como era de esperarse después del éxito que representó la primera parte de Los Ángeles de Charlie, su productora la también actriz del film; Drew Barrymore, reunió a casi todo el elenco de la anterior cinta, a excepción de Tom Green que por razones del divorcio que sostuvo con Barrymore no aparece esta vez, y de Bill Murray quien no acepto debido a que dicen no aguantaba a Lucy Liu, los demás, incluidas la tres bellas angelitas han vuelto a la carga en esta secuela en la que no hay mucho cerebro de por medio.
Aquí la trama es lo de menos, inclusive es lo último en lo que se fijaron sus realizadores, y por raro que parezca también descuidaron mucho el aspecto de los efectos especiales, punto que se ha convertido en parte medular de este tipo de producciones, por lo general las cintas del verano están cargadas de acción, efectos espectaculares, explosiones, actores de moda, etc. Esta secuela cumple con todos los aspectos ya mencionados menos con el de efectos espectaculares, y es que hay escenas en las que luce totalmente irreal lo visto en pantalla, y además si a esto se le agrega el hecho de que el guión es bastante insulso, pues vuelve bastante ridículo el espectáculo.
Por lo menos McG o Joseph McGinty como realmente se llama, vuelve a la dirección, lo bueno aquí radica en el hecho de que este joven director a demostrado tanto en su carrera dirigiendo comerciales y videos musicales para cantantes como Korn, Cypress Hill, Sugar Ray, entre otros, como en su anterior cinta, que es un buen artesano y que mínimo tiene una buena visión de lo que es llamativo a los ojos de los espectadores.
Además de regresar McGinty a la silla de director y Barrymore a la de productora, también regresa Cheng-Yan Yuen quien fuera el coreógrafo de la primera película, y que además ha puesto la coreografía junto con su hermano Yuen Wo-Ping de las cintas Matrix Recargado y Matrix Revoluciones, por lo que al menos el aspecto de las artes marciales y las peleas vale un poco la pena.
Otro aspecto de llamar la atención de esta cinta no muy recomendable es el que en ella aparecen varios cameos , como los de Bruce Willis, Carrie Fisher, Jaclyn Smith (quien fuera una de las Ángeles de Charlie del programa original) John Cleese, Robert Patrick, y la cantante Pink, es interesante identificar sus actuaciones por muy pequeñas que sean, en especial la de Willis y la de Cleese.
Por otro lado quien definitivamente se roba la pantalla en esta secuela no es ninguna de las Ángeles, al contrario, quien se roba la atención es ni más ni menos que la antagonista; Demi Moore, es increíble la forma en la que luce a sus cuarenta años, inclusive luce mucho mejor que las tres protagonistas, y aunque su actuación no es nada del otro mundo, es realmente un placer verla en escena sólo por la belleza que irradia y que desde hace tres años no nos dejaba ver en ninguna película.
Aunque en este tipo de cintas lo más importante nunca ha sido la trama y la verdad lo importante radica en el hecho de que tan divertida es, en este film sí se pasaron, de que es entretenida, lo es, pero realmente es un suplicio la forma en que se desenvuelve la historia , ésta es tan superflua y ridícula que raya en lo estúpida.
Pero como a las cintas de verano no hay mucho que pedirles, el público ávido de entretenimiento de palomitas, acción, peleas, bellezas en pantalla, chistes efectivos, etc, encontrarán en esta su mejor opción para ir al cine.
En conclusión es un film ridículo con momentos realmente irreales, lo único que se salva realmente de este proyecto son algunas secuencias de acción, las peleas, la presencia de Demi Moore, y algunos momentos graciosos que aporta el comediante de color Bernie Mac, de ahí en más es un desastre total, al parecer a Hollywood ya se le olvidó que lo más importante en una película es su historia, pero con cintas como ésta nos demuestra que eso ya quedó en el pasado y que ahora lo que importa es lo visual y nada más.