Arturo González González
El Siglo de Torreón
GÓMEZ PALACIO.- Después de 37 días de que se cumplió el tercer plazo para que las 4 mil 200 cabezas de ganado fueran retiradas del establo “Herasun”, propiedad de Juan José Córdoba, debido a la cercanía con zonas habitacionales urbanas, la Jurisdicción Sanitaria # 2 del Estado de Durango, a través de su titular José Salomón Olvera Leyva, anuncia la clausura del lugar y la aplicación de una multa por 200 mil pesos.
Según lo que informa el funcionario, el rancho llevaba operando cerca de diez años. A raíz del crecimiento urbano registrado en esa zona de la ciudad, el “Herasun” quedó prácticamente rodeado por viviendas, cuyos habitantes empezaron a externar, cada vez con mayor insistencia, las molestias ocasionadas por la nube de polvo de tierra y estiércol levantado cuando las reses son trasladadas. Riegos para la salud, fétidos olores y poca visibilidad a la redonda, representan los principales problemas ocasionados a los habitantes de las colonias aledañas por las labores del establo. Olvera Leyva dice que, aunque no está muy seguro, “parece que los propios terrenos fraccionados son propiedad del dueño del ‘Herasun’ ”.
Más adelante, establece que ante las constantes denuncias de los vecinos, la Jurisdicción procedió a intervenir emitiendo un primer ordenamiento que establecía que para noviembre del año pasado debería estar fuera todo el ganado vacuno. El plazo se cumplió pero no así la exigencia de las autoridades sanitarias. Frente a esto, Juan José Córdoba “pidió al Gobernador que se le otorgara una nueva fecha límite, la cual le fue concedida... se acordó el 15 de enero (del 2003)”, según declara Salomón Olvera. Y es que el propietario argumentó que estaba todavía en construcción otro establo, éste rumbo a Dinamita, en el cual iba a reubicar las reses.
Los días volvieron a transcurrir y los animales siguieron ahí. “Volvieron a incumplir, pero, ahora significaba una burla para el Gobernador, porque con él se habían comprometido”, afirma el jefe de la Jurisdicción.
Pero no fue sino hasta el 24 de febrero cuando se realizó una verificación, junto con un Notario Público, para dejar asentado el incumplimiento. Se aplicó una multa de 100 mil pesos. No obstante, se concedió al dueño un tercer plazo con vencimiento el 15 de abril pasado.
¿Por qué?
—Es que el señor suplicó... habló a Durango y solicitó que se le diera más tiempo... dos meses pidió.
Mientras, las molestias, quejas y denuncias de los pobladores eran cada vez mayores y más frecuentes.
Llegó la nueva fecha y Juan José Córdoba seguía con las vacas en el “Herasun”. Unos cuantos días después las autoridades sanitarias acudieron a verificar y se percataron del hecho.
Pero ¿por qué hasta ahora se clausura?
—Porque tuvimos que establecer un nuevo procedimiento: verificaciones, citatorios, lo que hacemos normalmente... pero, ya las instancias estaban agotadas y ya se clausura y se le aplica otra multa de 200 mil pesos.
Según explica Olvera Leyva, el ordenamiento girado apenas el día de ayer consiste en que el propietario “no puede movilizar a los animales, es decir, no va a seguir surtiendo a sus clientes, esto para evitar que se levante la nube de polvo... si quiere sacar uno, los tiene que sacar todos”.
En caso de que viole los sellos de clausura ¿qué sucede?
—Se interpone una denuncia ante la PGR... es delito federal.
El Siglo de Torreón acudió al establo citado para verificar que los sellos estuvieran instalados. A la altura del kilómetro 4 de la carretera a Cd. Juárez, se encuentra la avenida que lleva al Cereso. Hasta el final de la misma, se encuentran las puertas tubulares del “Herasun”. Una gran cantidad de reses se observan a unos cuantos metros de la entrada. Uno de los encargados ratifica la información dada por la Jurisdicción Sanitaria número dos acerca de la clausura, e informa que los inspectores de la dependencia se encuentran en el lugar. Ningún sello puede verse todavía.
El mismo encargado comenta que dentro de pocos días van a trasladar las cabezas de ganado al establo recién construido “allá por Dinamita”, con lo que se pretende concluir por fin con las afectaciones a los pobladores.
Por su parte, José Salomón Olvera Leyva, ante la demora de la medida tomada, expresa, “una disculpa a la población porque se tardó, pero es que los procedimientos son lentos”.
El caso
Los antecedentes de la sanción contra el establo “Herasun”.
-Noviembre de 2002: se cumple el plazo para el traslado de las 4 200 cabezas de ganado. Ante la petición del propietario se accede a otorgar una prórroga.
-15 de enero de 2003: se cumple un segundo plazo sin que las reses hayan sido sacadas del lugar.
-24 de febrero: la Jurisdicción Sanitaria realiza una verificación y se asienta el incumplimien-to. Se conceden dos meses más al dueño del establo.
-15 de abril: se cumple un tercer plazo sin que el problema sea resuelto.
-21 de mayo: se anuncia la clausura del establo y la aplicación de una multa de 200 mil pesos.
FUENTE: Salomón Olvera Leyva, jefe de la Jurisdicción Sanitaria número dos.