Reuters
BOGOTÁ, COLOMBIA.- seis militares y un civil murieron ayer luego de que guerrilleros activaron un coche bomba en el noreste de Colombia, donde Estados Unidos entrena una brigada militar en operaciones antiterroristas y donde fueron secuestrados dos periodistas extranjeros.
El comando del ejército informó que el ataque, atribuido a las izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), se registró en una zona rural del municipio de Tame, en el departamento de Arauca, fronterizo con Venezuela, unos 350 kilómetros al noreste de Bogotá.
“La guerrilla activó un carro bomba contra una patrulla militar que realizaba operaciones de control y registro. Murieron seis soldados y el conductor del vehículo que transportaba los explosivos”, dijo un oficial del ejército.
El estallido también provocó heridas de gravedad a nueve militares y a un civil.
El ataque ocurrió en el mismo sector en donde el martes fueron secuestrados la periodista británica Ruth Morris y el fotógrafo estadounidense Scott Dalton, quienes cumplían una misión periodística para el diario Los Angeles Times.
El Ejército de Liberación Nacional (ELN), el segundo grupo rebelde del país con unos 5,000 combatientes, se adjudicó el secuestro de los periodistas y anunció que su liberación se producirá cuando existan condiciones “políticas y militares” que no especificó.
El secuestro de los periodistas provocó una oleada de condenas a nivel internacional, incluyendo la Organización de las Naciones Unidas y Reporteros Sin Fronteras, que exigieron al ELN su inmediata liberación.
Nuevo acto de violencia en zona de guerra
El ejército se abstuvo se precisar si las operaciones militares que cumplía la patrulla militar en el momento del ataque se relacionaban con la búsqueda y rescate de los dos corresponsales extranjeros.
La próspera región ganadera y petrolera de Arauca es una de las zonas más conflictivas de este país, azotado por una guerra interna de casi cuatro décadas y que dejó 40,000 muertos en los últimos diez años.
En la región, además de las FARC y del ELN, operan escuadrones paramilitares de ultraderecha, ilegales grupos armados que combaten a la guerrilla y a sus colaboradores.
Recientemente unos 70 efectivos de las Fuerzas Especiales de Estados Unidos llegaron a Arauca para entrenar una brigada del ejército de Colombia en operaciones antiterroristas y en la protección de un oleoducto que atraviesa la zona y que frecuentemente es bombardeado por la guerrilla.
El oleoducto Caño Limón-Coveñas transporta a diario 110,000 barriles de crudo que se producen en un complejo petrolero operado por la estadounidense Occidental Petroleum Corp. y fue objeto de 40 ataques en el 2002.
Tres municipios del departamento de Arauca forman parte de una de las dos zonas de guerra que el presidente Álvaro Uribe declaró en septiembre para enfrentar la violencia de la guerrilla.
Pero pese a esa medida del gobierno la violencia no ha cedido en Arauca. En las primeras semanas de enero tres coches bombas explotaron en diferentes sitios de ese departamento con saldo de cinco muertos y más de 15 heridos.
Las autoridades acusaron a las FARC de obligar a civiles a conducir vehículos repletos de explosivos para atacar a las fuerzas militares, una situación que al parecer se repitió ayer, según fuentes castrenses.