Segunda parte
Es muy común que los mexicanos nos inclinemos principalmente por una alimentación basada en antojitos. Pero en realidad no se requiere gastar mucho dinero para tener una alimentación balanceada. En cualquier lugar podemos realizar una buena comida con verduras, carne y frutas entre otras cosas.
Debido al acelerado ritmo que se presenta en las grandes ciudades, por lo general nos vemos obligados a consumir alimentos sencillos y rápidos y muy abundantes, como decimos frecuentemente “llenadores”. Esto sucede más durante el almuerzo a media mañana o bien por la noche cuando salimos a cenar algo callejero, cosa que cada día es más común y de hecho cada día se ven un mayor número de establecimientos de este tipo, desde los famosos tacos en sus diferentes estilos que ya hacen historia en nuestro país, hasta las hamburguesas, etc.
Entonces lo que sucede es que muchas personas sabiendo que tienen la opción de almorzar algo en la calle o en el trabajo, salen de sus casas sin desayunar, y luego más tarde por decir a la hora de la comida ya no tienen hambre, y desde luego por la noche nos quisiéramos comer hasta el refrigerador, y como llegamos cansados del trabajo, etc., pues nos apapachamos con los más suculentos antojos. Entonces es cuando pueden surgir los problemas, sobre todo por dejar que el organismo pase periodos prolongados de ayuno, para después comer abundantemente. Esto trae como resultado una alimentación deficiente, desordenada y sobre todo, crea una descompensación al organismo.
Por otro lado, debido a la falta de información adecuada en relación a la alimentación o a los alimentos que debemos ingerir, muchas personas llegan a consumir durante el día 3 ó más comidas muy copiosas, sin omitir los entremeses que casi siempre son golosinas o pan de dulce, refrescos, etc.; es decir se sobrepasa la cantidad de alimentos necesarios en un día, por lo que se cae, de esta manera en la sobrealimentación y como consecuencia la obesidad.
Siempre les he dicho a mis pacientes que existen tres factores muy simples de entender por lo cual las personas engordan; primero porque “comemos de más”, segundo porque “comemos lo que nos gusta y no lo que nos conviene comer’’ y tercero porque “somos indisciplinados’’. Lo más sano es hacer un desayuno energético completo, una comida normal satisfactoria y una cena muy ligera, y para aquellas personas que desayunan muy temprano y comen muy tarde es necesario un entremés a media mañana, puede ser una fruta, un emparedado ligero, una ensaladita, etc.
Lamentablemente, los alimentos que se consumen indiscriminadamente tienen en su composición gran cantidad de carbohidratos y grasas, con bajo contenido de proteínas. Los que son ricos en carbohidratos, son: Los panes, tostadas, tortillas, alimentos chatarra, etc., y los ricos en grasas son por ejemplo: frituras, pizzas, tacos, grasa animal, tocino etc. Éstos provocan en nuestro organismo la acumulación de tejido adiposo que da como resultado las famosas llantitas, y todavía más peligroso el desarrollo de arterioesclerosis y el riesgo de padecer enfermedad cardiovascular, problemas circulatorios periféricos, así como gastrointestinales, mala digestión, gastritis, colitis, etc. Así que cuídese mucho y trate de empezar a organizar lo mejor que pueda su forma de comer, y vigile celosamente lo que se lleva a la boca.
Continuaremos con este tópico la próxima semana. ¡Hasta pronto!
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