Reuters
Beijing,, CHINA.- Beijing dijo ayer que está tratando de calmar el pánico popular por el virus que causa el Síndrome Agudo Respiratorio Severo (SARS), que amenaza con saturar los hospitales de la nación.
Sin embargo, Toronto expresó su júbilo después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) levantó su advertencia de no viajar a la capital financiera de Canadá.
El alcalde interino de Pekín, Wang Qishan, dijo que la semana entrante sería crítica para determinar si la diseminación del SARS, también conocido como neumonía atípica, estaba disminuyendo.
El aumento de la cantidad de casos de SARS en la capital china ha desatado temores entre la población y en algunas zonas ha provocado la adquisición compulsiva de medicamentos y de alimentos sellados mientras los residentes almacenan para esperar en sus casas que el peligro de la enfermedad se desvanezca.
“Como aún no se ha aliviado el pánico entre el público, se necesita trabajar mucho para asegurar la estabilidad social”, dijo Wang a periodistas extranjeros.
“Debido la escasez de camas en determinados hospitales, no todos los pacientes sospechosos de SARS pueden ser hospitalizados en el momento adecuado”, dijo y añadió que el gobierno estaba ampliando el número de hospitales que pueden lidiar con la enfermedad a más de 12.
Beijing es la zona más afectada por el SARS en el mundo, con más de 100 nuevas infecciones diarias y alrededor de 1,400 casos y 75 muertos por la enfermedad.
La cifra de infecciones se ha disparado desde que China comenzó a reportar cifras concretas el 20 de abril. Beijing ha cerrado escuelas y teatros y ha puesto a casi 10,000 personas en cuarentena. Wang prometió tomar pasos decisivos para controlar la enfermedad.
Algunos distritos de Shangai comenzaron a imponer un aislamiento de 14 días a los visitantes provenientes de zonas afectadas por el SARS, incluido Beijing.
China también anunció el cierre de su bolsa de valores del primero al nueve de mayo, mientras el gobierno trata de mantener la enfermedad lejos de los atestados pasillos de negociaciones.
Taiwán dijo ayer que otras dos personas habían muerto del SARS y que la cifra de casos sospechosos había aumentado abruptamente de 151 a 174.