Notimex
BERLÍN, ALEMANIA.- El gobierno alemán rechazó ayer en esta capital el envío de tropas a Iraq a menos que haya "un claro mandato de las Naciones Unidas" y "un gobierno de transición iraquí legítimo", de acuerdo a su portavoz oficial, Bela Anda. En la conferencia de prensa donde tuvieron lugar esas declaraciones, portavoces del Ministerio alemán de Asuntos Exteriores señalaron a su vez que el tema no era objeto de consideración por parte del gobierno alemán en la actualidad.
Añadieron que la responsabilidad por la estabilización de Iraq compete a la coalición de países que encabeza Estados Unidos y que lo anterior está contenido en la resolución que emitió el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, posterior al conflicto armado. El tema surgió por preguntas de la prensa después de que el Secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld, declaró que apoyaría la participación de tropas alemanas y francesas en la estabilización de Iraq.
Bela Anda manifestó que la posición del gobierno del Canciller Federal, Gerhard Schroder, no se había modificado después del término de los combates. Agregó que Alemania prestó hasta ahora amplia ayuda humanitaria a Iraq.
El Ministerio de Asuntos Exteriores precisó que esa institución puso a disposición de la ayuda humanitaria a Iraq cuatro millones de Euros, mientras que el Ministerio de Cooperación Internacional (ayuda al desarrollo) aportó diez millones de euros de su presupuesto.
La Ministra alemana de Cooperación Internacional, Haidemarie Wieczorek-Zeul, declaró en Berlín que el deseo que expresó Estados Unidos sobre la participación de la OTAN en la campaña militar que lleva a cabo en Iraq era "completamente inaceptable".
Apuntó que Estados Unidos quiere continuar administrando sólo los ingresos procedentes de la exportación del petróleo iraquí pero que, por el contrario, busca distribuir el riesgo militar con otros países. Ángela Merkel, la Presidenta del principal partido opositor, la Unión Demócrata Cristiana, coincidió ayer en Berlín con el curso que sigue el gobierno socialdemócrata-verde del país europeo en torno al envío de tropas alemanas a Iraq.
Señaló que su partido considera que para ello se requiere de un Mandato de las Naciones Unidas y que consideraba "razonable que la Organización del Tratado de la Alianza Atlántica (OTAN) juegue un papel en el proceso de reconstrucción de Iraq".
Agregó que la eventual colaboración de la Alianza Atlántica debería insertarse en una resolución que emita las Naciones Unidas.