SEATTLE, EU, agosto 22 (UNIVERSAL).- El presidente George W. Bush señaló hoy que "elementos extranjeros" se están infiltrando en Irak con la esperanza de perpetrar atentados terroristas, mientras que predijo que los aliados de Estados Unidos enviarán más tropas para garantizar la seguridad iraquí.
"Irak se está convirtiendo en una constante batalla en nuestra guerra contra el terrorismo", dijo el presidente tras un encuentro con un equipo de líderes económicos.
Unas 500 personas aprovecharon la presencia del presidente para protestar contra la ocupación de Irak y su política económica.
El presidente comentó que su gobierno está trabajando con las Naciones Unidas para alentar a otras naciones a que contribuyan a establecer la paz en Irak. "Habrá más tropas extranjeras en Irak", dijo.
Por su parte, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, advirtió el viernes que el Consejo de Seguridad probablemente no apoyaría una nueva resolución para el envío de más fuerzas a Irak si la coalición dirigida por Estados Unidos no conviene en compartir el proceso de toma de decisiones y la responsabilidad.
Annan reiteró que Naciones Unidas no considera el envío de una fuerza de mantenimiento de la paz a Irak "pero que no se ha excluido que el consejo pueda decidir transformar la operación (y formar) una fuerza multinacional que obedecería el mandato de la ONU y a la cual se unirían otros gobiernos".
Eso "implicaría no sólo compartir la carga sino también las decisiones y la responsabilidad", dijo Annan después de una reunión con el secretario británico de Relaciones exteriores, Jack Straw. "Si eso no sucede, yo creo que será muy difícil lograr una segunda resolución que satisfaga a todos".
Las principales objeciones contra una resolución para el envío de más soldados a Irak ha sido la insistencia de Washington de retener el mando de toda la actividad militar en la nación ocupada, y su aparente rechazo, hasta ahora, para permitir la ampliación del mandato de la ONU, que incluye la asistencia humanitaria y que el organismo ayude en la reconstrucción del país.
Mientras tanto, en Bagdad, funcionarios internacionales prometieron hoy continuar su trabajo en Irak, mientras rendían tributo al jefe de la misión de la ONU en el país árabe, una de las 24 personas que murieron en el atentado con un camión bomba contra la sede de la ONU en Bagdad.
En una ceremonia efectuada en el aeropuerto de Bagdad, el cuerpo del diplomático Sergio Vieira de Mello, quien tenía 55 años, fue colocado en un avión para comenzar el viaje a Brasil, su tierra natal.
"No nos dejaremos intimidar por ningún acto de terrorismo", dijo el gobernador estadounidense en Irak, Paul Bremer, en la ceremonia de despedida del cadáver de Vieira de Mello.
En Brasilia, un vocero de la presidencia brasileña informó hoy que Annan asistirá este sábado en Río de Janeiro al velatorio de Vieira de Mello.
Según informaciones de prensa, los restos del funcionario de la ONU serán enterrados el lunes en la localidad francesa de Thonon-les- Bains (Alta Saboya), cerca de la frontera con Suiza, donde la familia de su esposa posee una casa.